La llegada de un bebé viene acompañada de un buen número de sensaciones contrapuestas. Dudas, certezas, amor y temor, ganas de que conozca el mundo donde ha nacido y la necesidad de protegerlo de él… Si el pequeño viene en verano, los padres tendrán algunas preocupaciones añadidas; saber cuándo el pequeño tiene demasiado calor y si está suficientemente protegido del sol
Como norma general, un bebé recién nacido en los meses de verano deberá estar siempre protegido del sol directo, pero necesita recibir su calor y radiación para sintetizar la vitamina D, que ayuda al desarrollo de los huesos y previene el raquitismo. Por otro lado, la temperatura de un bebé oscila entre los 35,8 y los 37,2 º C, un elemento que en demasiadas ocasiones se pasa por alto. Temiendo que pierdan temperatura se les abriga en exceso, en verano esto puede llegar a ser peligroso.
Lo más acertado para tener a un bebé protegido y saludable en verano es elegir la ropa adecuada, esa que va a permitir estar al aire libre, completamente seguro, pero sin acumular un exceso de temperatura. En este sentido, se debe insistir en que lleven la mayor parte de su atuendo en algodón. Incluso en la época estival, se recomienda el uso de gorros y medias para cubrir pies y cabeza, y cubrirlos con mantitas de algodón ligero.
¿Cómo debe ser la primera puesta del bebé durante el verano?
Una de las muchas dudas que suelen tener los padres de un recién nacido en verano es qué ropita llevar para salir del hospital para que el pequeño se sienta a gusto, los padres estén tranquilos y puedan enseñar a su hijo orgullosos.
Para acertar plenamente, existen tiendas especializadas en ropa para bebés, como Bamboo online, donde se ofrece un amplio y exquisito catálogo para vestir al bebé en sus primeros días. Esta tienda se ha convertido en el referente para todos aquellos padres que quieren que sus hijos recién nacidos vayan cómodos, protegidos, elegantes y atractivos. También es el lugar ideal para adquirir el regalo perfecto para ese familiar o amigo que acaba de cumplir su sueño de tener un hijo.
Ellos aconsejarán que además de un diseño bonito, para el verano la ropa que se utilice sea ligera. Como ya se ha dicho anteriormente, se cubren los pies y la cabeza para que el bebé pueda regular su temperatura corporal. La ropa deberá ser siempre de lino o de algodón, transpirable e hipoalergénica para evitar que su delicada piel sufra algún tipo de daño. En cualquier caso, en la tienda online referenciada, Bambooropainfantil.com, se puede pedir consejo sobre la elección de un conjunto recién nacido especial para estos meses de calor.
Cuidados del bebé en verano relacionados con la ropa
Si el bebé está en casa, no tiene pensado salir ni se espera visita alguna, lo mejor para él es que lleven solo el pañal durante las horas más calurosas del día, cuidando de no exponerlo a corrientes de aire ni a la acción directa de los aparatos de aires acondicionados.
Por otro lado, cuando la temperatura disminuye lo suficiente, habrá que ponerle algo de ropa sobre el torax, que, como ya se ha indicado, deberá ser de algodón o lino. Para que el pequeño rey de la casa no se agobie, además de usar estos materiales que son más frescos y agradables, también deben ser holgados y ligeros.
Los expertos señalan que las piernas se deben llevar descubiertas, pero no así sus pies que tienden a enfriarse demasiado. Se recomiendan que lleven puestos unos calcetines suaves de algodón, aunque no salgan de su carrito.
A las horas nocturnas hay que prevenir la bajada de temperatura que sufrirá toda la vivienda, para que los más pequeños no la padezcan. Lo que se debe hacer es vestirlos con un pijamita de verano completo, y según el descenso que se vaya a producir de la temperatura, añadirle un body fino.
En cualquier caso, hay que limitar el uso de los bodys o camisetas de interior durante el día, ya que al ir más ajustadas ofrecen más calor. En cambio, sí se debe proteger la cabeza y la piel cuando se salga al exterior, evitando la acción directa del sol en los medios días. El calzado deberá ser abierto, de piel o loneta, que actuarán en contra del sudor y de la proliferación de hongos.
Otros cuidados del bebé en verano más allá de la ropa
Además de elegir la ropa adecuada para cada momento del día, es imprescindible valorar otro tipo de acciones que permitan que el bebé se encuentre siempre en las mejores condiciones posibles.
Para empezar, hay que mantenerlo constantemente hidratado, regular la vivienda con una temperatura estable, sin grandes cambios, y llevar a cabo frecuentes baños que lo refresquen en los momentos en los que la temperatura sea más elevada. En algunos casos, bastará con pasarle una manopla o paño húmedo.
No se deberá salir de la vivienda en las horas de más calor ni abusar de los aires acondicionados. Tampoco hay que exponerlos a la acción directa de los ventiladores. Por el día, las persianas bajadas, y por las noches abiertas, el frescor natural siempre será mejor que el artificial.