La cafeína anhidra es una sustancia natural que está presente en 60 especies de plantas distintas como el cacao, los granos de café o las hojas de té. Por tanto, esta sustancia es el resultado de los elementos químicos de estas plantas que se juntan con el agua y se filtran en un laboratorio, dejando un polvo blanco que aporta múltiples beneficios. Estos son los mejores beneficios que puedes encontrar en la cafeína anhidra y que pueden ayudarte a aumentar la concentración, potenciar el rendimiento deportivo y mejorar la fuerza física, entre otros aspectos.
¿Qué beneficios tiene la cafeína anhidra?
La cafeína anhidra estimula el sistema nervioso central. Esta sustancia llega a la circulación de la sangre mediante el estómago y el intestino delgado, provocando el efecto deseado a los 15 minutos de su consumición. Por tanto, estimula el organismo y aumenta la motivación y la energía de forma casi inmediata.
Además, se mantiene en el organismo durante varias horas, actuando en determinadas zonas del cerebro como la adenosina y en otras zonas del cuerpo, aumentando la respiración y el ritmo cardíaco al mismo tiempo que contrae los vasos sanguíneos.
Por otro lado, cabe señalar que, cuando se combina la teanina con la cafeína anhidra, se eliminan los efectos adversos de la cafeína como el nerviosismo, el insomnio o la hiperactividad. De esta forma, se consigue una lucidez que no se puede obtener con ninguna otra bebida energética.
De hecho, hay estudios que apoyan esta combinación, ya que incrementa la agudeza visual, mejora la capacidad de reaccionar de forma más rápida ante estímulos, aumenta la concentración y mejora la fuerza física, gracias a que la destreza de los músculos es superior.
Sustancia conocida en el ámbito deportivo
Por sus múltiples beneficios, la cafeína anhidra potencia el rendimiento de los atletas. De hecho, diversos estudios han demostrado que esta sustancia favorece el rendimiento de resistencia a la hora de correr o montar en bicicleta. Además, un análisis efectuado por la Revista de la Sociedad Internacional de Nutrición ha descubierto que la cafeína anhidra favorece la potencia muscular, así como los niveles de potencia generales.
En este sentido, los expertos señalan que, a la hora de consumir cafeína para el ejercicio físico, lo más idóneo son las cápsulas, ya que estas proporcionan la dosis exacta para el organismo. Aunque eso no excluye la posibilidad de tomarlo en tazas de café o té.
¿Cómo implantar la cafeína anhidra en una dieta equilibrada?
Se recomienda tomar cafeína anhidra una hora antes de hacer ejercicio, concretamente, una cantidad que se encuentre entre los tres y los seis miligramos por cada kilogramo de peso que tenga la persona. Además, siempre hay que comenzar por una dosis reducida para conseguir poco a poco aumentar el rendimiento. Cabe señalar que las dosis superiores a seis miligramos por cada kilogramo pueden ser perjudiciales para la salud y provocar efectos secundarios.
No obstante, si se decide consumir cafeína anhidra sin hacer ejercicio, es aconsejable tomarla por la mañana, ya que los beneficios que aporta pueden alterar el sueño si se toma a una hora próxima al descanso. Asimismo, es importante destacar que hay que realizar cinco comidas al día que aporten las vitaminas, proteínas, minerales, carbohidratos y grasas necesarias para llevar una vida sana. Esto incluye el consumo de carne, vegetales, lácteos, pescado, alimentos con almidón, frutas y verduras.
La capacidad de controlar el ritmo circadiano
La cafeína es consumida por todo el mundo porque libera unas sustancias químicas en el cerebro que ayudan a mantener despiertas a las personas, a la vez que impiden otras que favorecen la sensación de somnolencia. Por eso, es tan conocida por quitar el sueño. De hecho, si la cafeína se consume antes de dormir, se produce un retraso de 40 minutos en el reloj interno de las personas.
Con respecto a este estudio, los científicos de la Universidad de Colorado basaron su investigación en los resultados de la administración de cafeína a cinco individuos tres horas antes de la hora de dormir durante 49 días. En los resultados, los expertos concluyeron que la cafeína retrasó 40 minutos el reloj circadiano, provocando la mitad del efecto que produce la exposición de una luz intensa como la generada por los dispositivos electrónicos antes de dormir.
Este estudio está basado en la secreción de melatonina, la sustancia encargada de avisar al cuerpo que es de noche y de prepararlo para el descanso reparador nocturno. No obstante, no solo han realizado esta investigación para conocer el efecto de la cafeína en el ritmo circadiano, sino también a nivel celular.
De hecho, Kenneth Wright, uno de los científicos que participaron en el estudio, explica que, si la cafeína es consumida adecuadamente, puede utilizarse para regular el reloj interno de las personas. Por tanto, la cafeína no solo ayuda a quitar el sueño, sino que también permite ordenarlo.