(dpa) – Por lo general, los empleados no tienen permitido llevar a su perro o a su gato al trabajo. Sin embargo, en algunos casos, es posible hacerlo si se le pide permiso antes al jefe.
Sin embargo, a la hora de evaluar el permiso, éste deberá tener en cuenta si hay otros empleados que tienen alergia o miedo a los animales.
Por otro lado, es importante que un jefe sea consciente de que si permite a un empleado llevar a su perro al trabajo, difícilmente pueda luego prohibírselo a otro que pida lo mismo.
Además, el hecho de que el jefe permita el ingreso del animal al lugar de trabajo no significa que esto vaya a ser así para siempre. Lo que no se recomienda es que un empleado lleve a su mascota al trabajo sin pedir permiso. En ese caso, uno se arriesga incluso a ser despedido.
Sin embargo, en algunos casos, y dependiendo de la ley de cada país, el empleado puede llevar a su animal al trabajo. Esto rige, por ejemplo, en el caso de los perros-guía de personas ciegas.