Sidney (dpa) – Por supuesto que al cumplir 65 años se piensa también en la muerte. Y en lo que se legará al mundo. Si fuera el caso de Jane Campion, la directora de cine más reconocida de Nueva Zelanda, todos coincidirían en destacarla como la única mujer que ganó una Palma de Oro en Cannes.
Pero en unos años, luego de que ojalá muchas otras mujeres alcancen su logro, quedará grabada una toma de ella: la imagen de un piano en una playa solitaria de arena oscura.
Jane Campion cumplió este 30 de abril 65 años. Su mayor triunfo fue hace más de un cuarto de siglo, cuando su film «La lección de piano» (The Piano) ganó en 1993 en el Festival de Cannes el premio quizás más importante del cine europeo y luego sumó tres Oscars.
Es un melodrama ambientado en el siglo XIX que tiene como protagonista a una inmigrante escocesa muda en Nueva Zelanda. En la escena más recordada, la mujer toca el piano en las arenas de la playa Karekare, en la costa oeste de Nueva Zelanda. Aún hoy peregrinan hasta allí los turistas para conocer el lugar.
Ya casi todos olvidaron que aquella vez Campion tuvo que compartir la Palma de Oro con el chino Chen Kaige («Adiós a mi concubina»). Y que a ese gran éxito le siguió la mayor tragedia de su vida: un mes después murió su hijo Jasper, de apenas doce días de vida.
«El éxito nunca me llegó totalmente. Estuve un año entero de luto, luché por mi existencia», recordó en una entrevista con «The Guardian». Luego tuvo a su hija Alice Englert, quien hoy es actriz («Beautiful Creatures»).
Es una familia de artistas. La madre de Jane Campion fue una de las actrices más famosas de Nueva Zelanda, su padre fue un exitoso director teatral y de ópera.
Ella estudió arte y cine en Londres y Sidney. Cuando aún era estudiante, Jane Campion fue distinguida en 1996 en Cannes con la Palma de Oro al mejor cortometraje por «An Exercise in Discipline – Peel».
Sus películas «Sweetie» y «Un ángel en mi mesa» la convirtieron rápidamente en una de las mujeres más célebres del cine de autor.
Pero no pudo repetir el éxito de taquilla de «La lección de piano». «Retrato de una dama», con Nicole Kidman, y el thriller erótico «En carne viva», con Meg Ryan, no fueron bien recibidas por la crítica y fracasaron en los cines.
Después de esos traspiés poco se supo de ella. «Me tomé un par de años para pensar cómo quiero hacer las cosas. Y para criar a mi hija», explicó tiempo después.
Con la serie policial de televisión «Top of the Lake» (2013-2017), Campion volvió a cosechar elogios. La crítica destacó especialmente, como en varias de sus primeras películas, los personajes femeninos de enorme fortaleza y los paisajes magníficos.
La primera temporada tuvo como escenario un pueblo de su país natal, Nueva Zelanda; la segunda se filmó en gran parte en Sidney, donde Campion reside desde los años 1980. La directora viaja seguido a Europa y una vez presidió el jurado en Cannes.
Campion rompe con todas las teorías sobre las diferencias entre le cine y la televisión.
«Como cineasta, tratas de pensar en un buen crimen para atrapar a la gente. Se trata de contar historias. Doy a la televisión la misma energía y amor que a mis películas. Y viceversa», aseguró la realizadora en 2017 al recibir el premio cinematográfico Colonia en Alemania. Campion trabaja actualmente en una nueva película.
Por Christoph Sator (dpa)
Foto: Caroline Seidel/dpa