La Habana, 22 feb (dpa) – Este domingo los cubanos acuden a las urnas para ratificar una nueva Constitución llamada a sustituir a la actual, aprobada en 1976. Una comisión encabezada por el ex-presidente Raúl Castro elaboró el texto que pasó por tres meses de debates en barrios y centros de trabajo y por una sesión plenaria de la Asamblea Nacional.
Éstos son algunos de los puntos que centraron los debates:
EMPRESAS PRIVADAS: Las reformas económicas emprendidas por Raúl Castro (2008-2018) abrieron paso al trabajo autónomo, que hoy emplea a más de medio millón de personas y representa un 13 por ciento de la economía nacional. Muchos de estos «cuentapropistas» son falsos autónomos que dirigen pequeñas y medianas empresas. Pero la Constitución de 1976 solo reconocía la propiedad estatal y la cooperativa agropecuaria. Ahora se incluirá en el nuevo articulado «otras formas de propiedad como la cooperativa, la propiedad mixta y la propiedad privada».
GOBIERNO: Hasta ahora el presidente de la nación lo era porque encabezaba el Consejo de Estado, un órgano legislativo, pero el nuevo texto crea la figura del Presidente de la República y del Primer Ministro, elegidos por los diputados de la Asamblea Nacional, y se limitan los mandatos de Gobierno a dos periodos de cinco años.
COMUNISMO: Aunque en un primer momento se eliminó, tras las críticas en las asambleas fue repuesto al texto, por lo que se mantiene como objetivo «el avance hacia la sociedad comunista”. El artículo quinto continua poniendo al Partido Comunista de Cuba como único partido permitido en el país al ser «la fuerza dirigente superior de la sociedad y el Estado».
MATRIMONIO: La Constitución de 1976 solo reconoce el matrimonio entre el hombre y la mujer. Inicialmente se quiso cambiar y abrir la puerta al matrimonio homosexual incluyendo el artículo 68, el cual decía que el matrimonio era entre personas, sin mas especificaciones. Pero la fuerte campaña en contra por parte de las iglesias evangélicas hizo que se buscase una solución intermedia: «La ley determina la forma en que se constituye y sus efectos», con esa ambiguedad se deja abierto para retomar el debate en el nuevo Código de Familia.
INVERSIÓN EXTRANJERA: El articulado reconoce que el capital foráneo no es algo que eventualmente soluciona problemas que surgen sino que es un elemento importante de desarrollo para el despegue de la economía nacional. Las autoridades cubanas han manifestado que el país tiene que atraer más de 2.500 millones de dólares anuales para crecer.
Por Guillermo Nova (dpa)
