Tokio, 10 dic (dpa) – El ex presidente de Nissan Carlos Ghosn, detenido de forma preventiva desde hace tres semanas en Tokio, fue acusado hoy formalmente por la Fiscalía de esconder parte de sus ingresos durante un período de cinco años.
La fiscalía acusó a Ghosn, a su ayudante Greg Kelly y a la propia automotriz.
En concreto se acusa a ambos directivos de informar irregularmente sobre los ingresos de Ghosn en los documentos de Nissan por unos 5.000 millones de yenes (44 millones de dólares/38,5 millones de euros).
En un comunicado, Nissan señaló que toma «muy en serio» la situación. Ghosn está bajo arresto desde el 19 de noviembre al igual que Kelly, ex director de Nissan.
La pena máxima en Japón por presentar una declaración financiera falsa es de hasta 10 años de prisión y una multa de hasta 10 millones de yenes (89.000 dólares).
Durante meses, empleados de Nissan investigaron los indicios de que Ghosn había estado ocultado a la bolsa de Tokio parte de su salario. El ejecutivo era presidente del consejo de administración de la japonesa Nissan -que lo destituyó por el escándalo- y presidente de la junta directiva en la francesa Renault.
Ghosn figura entre los directivos más destacados de la industria automovilística. Con la alianza entre Renault y Nissan, así como con el fabricante japonés Mitsubishi, el empresario brasileño creó un conglomerado que vende al año 10,6 millones de vehículos al año entre automóviles y pequeños vehículos de servicio.