La familia Franco pide honores militares para el “nuevo” entierro

Madrid, 2 oct (dpa) – Francisco Franco enterrado en el centro de Madrid y con honores militares: es el pedido que la familia del dictador elevó al Gobierno español para el caso de que el cuerpo sea exhumado del mausoleo en que se encuentra actualmente.

El pedido figura en las alegaciones presentadas el viernes por los descendientes de Franco (1892-1975) contra el decreto impulsado por el Gobierno y aprobado por el Congreso para exhumar los restos de Franco del conjunto monumental del Valle de los Caídos.

Según el documento con las alegaciones difundido por la Fundación Francisco Franco, la familia pide que, si fracasa su intento por frenar la exhumación, Franco reciba «cristiana sepultura en la Cripta de la Catedral de La Almudena de Madrid» con honores militares.

Los Franco cuentan con una cripta en la catedral, situada en pleno centro turístico de Madrid. El pedido de honores militares, entre tanto, se apoya en un decreto de 2010 que establece esa distinción para el rey, la familia real, el presidente del Gobierno y otras autoridades del Estado, incluyendo los principales mandos militares.

Tanto el sitio elegido por la familia como los honores exigidos -que incluyen interpretación del himno español, descarga de fusilería y salva de cañonazos- van justo en contra del intento del Gobierno de evitar que la tumba de Franco se convierta en destino de peregrinaje de ultraderechistas.

El cadáver de Franco se encuentra desde su muerte en 1975 en el Valle de los Caídos, un conjunto monumental construido entre 1940 y 1958 por orden del dictador en gran parte gracias al trabajo forzoso de presos políticos unos 60 kilómetros al noroeste de Madrid.

El monumento, coronado por una gran cruz blanca de 150 metros de altura, fue dedicado por Franco a todos los caídos en la Guerra Civil (1936-1939) y alberga restos de unos 32.000 fallecidos en el conflicto por ambos bandos, aunque el mausoleo se considera un homenaje a la dictadura y destino de peregrinaje de ultraderechistas.

Todos los intentos llevados a cabo hasta ahora para despolitizar el lugar fracasaron, hasta que el socialista Pedro Sánchez llegó al Gobierno en junio tumbando con una moción de censura al conservador Mariano Rajoy y se comprometió a exhumar a Franco. Los descendientes prometieron apelar a la Justicia para impedir que eso ocurra.