300 Rise of an Empire, se prepara para la conquista de la taquilla.

300 300LOS ANGELES (dpa) – Pocas películas causaron tanta admiración y sorpresa en 2007 como «300», con la reconstrucción de una epopeya griega con el lujo de la tecnología actual, por lo que no era de extrañar que llegara la secuela, «300: Rise of an Empire», con el inconfundible sabor de la original.

Es la vuelta de lo que, con seguridad, se considerará un clásico en el futuro, una cinta de proporciones épicas que con Zack Snyder a los mandos revolucionó la cartelera en forma de millones de dólares y buenas críticas. El filme que ahora se estrena es una continuación que sucede antes, durante y después de la acción de la original, otra tragedia entre la alianza de polis helenas y el imperio persa en el 480 antes de Cristo, en los estrechos entre la península y la isla de Salamina.

En esta ocasión, Snyder, en calidad de productor, ha trabajado con Frank Miller, autor de la serie de comics original en que se basó la película de 2007, adaptando a un guión cinematográfico la novela gráfica con la que continuó narrando su muy gráfica visión de lo sucedido en esa etapa de la Historia.

Además del cambio de director, de Snyder a Noam Murro, las variables son ostensibles con respecto al primer largometraje, centrada en el segundo intento de invasión del territorio griego por parte de los persas, esta vez comandados por Artemisa, reina de Caria.

La protagonista no es otra que Eva Green, que sustituye al escocés Gerard Butler llevando el peso de la película en una interminable batalla naval, con la misma fuerza visual que la primera y una tecnología aún más avanzada que en la primera cinta. «Es muy inusual que en aquellos días hubiera una mujer al frente de un ejército como el persa, por eso me atrajo el personaje. Es una mujer muy valiente, dura, sin escrúpulos y obsesionada con la venganza», explica la actriz nacida en Francia.

Reconoce que no fue fácil adaptarse al rol por la intensidad física de las escenas de guerra, constantes en la película, y por haber tenido incluso que aprender a manejar la espada con soltura. «El guión me llamó mucho la atención. Es la primera vez que hago una película de acción y la idea de hacer algo tan duro me atrajo mucho», indicó.

De acuerdo al director, Noam Murro, la idea de trabajar con Snyder era mantener el ADN de la cinta original pero con la suficiente variación como para que el espectador percibiera el cambio. «Ese fue el desafío», explica Murro. «Cómo mantener suficiente esencia y aún así crear algo nuevo».

El realizador asegura que la metodología fue muy parecida a la primera película, con pantalla verde para poder encajar después las escenas de la batalla naval, un reto por tener que manejar un elemento tan complejo como el agua. Para Murro fue un elemento que en «300» no existió  puesto que todas las batallas fueron en tierra. En este caso, el agua añadió un componente operístico que hace la película aún más espectacular.

En cuando a la elección de los personajes principales envueltos en esta contienda, todos coinciden en señalar que el haber visto la primera cinta les condicionó a la hora de decir que sí casi de forma automática. Es el caso del brasileño Rodrigo Santoro, que calificó de «honor» el haber estado a las órdenes de Murro. «Afortunadamente, me dieron el papel. Es una película épica».

Y así se espera que sea en cuestiones de recaudación, con la idea de superar el fenómeno de la primera y de seguir triunfando con un pedazo de historia con un giro inconfundiblemente moderno.

Por Liliana Martínez-Scarpellini