Wolfsburgo (Alemania), 22 feb (dpa) – Responsables de la automotriz alemana Volkswagen aseguraron a dpa que la empresa pretende seguir dando prioridad a los candidatos internos sobre los externos en su política de contratación.
Sin embargo, en divisiones como la de software o de tecnologías de baterías, el grupo también está intensificando la búsqueda de mano de obra externa.
Esta política está cubierta por los propios programas de formación de la empresa, explicaron el miembro de la junta directiva responsable de Recursos Humanos, Gunnar Kilian, y la presidenta del comité de empresa, Daniela Cavallo.
«‘Congelación de nivel’ no significa congelación de la contratación», explicó Kilian sobre las que han sido calificadas como restricciones de contratación del primer grupo automovilístico europeo.
Por ejemplo, señaló, el año pasado se incorporaron casi 1.000 desarrolladores a la nueva filial de software Cariad. «Pero, sobre todo, también es un gran interés compartido con el comité de empresa acelerar la transformación interna», agregó Kilian.
El directivo detalló que en 2021 hubo más de 1,5 millones de horas de formación en Volkswagen, 430.000 de ellas para temas de futuro como la electromovilidad o la digitalización. Sin embargo, vaticinó que la demanda interna de la empresa aumentará: «Esto conduce a una continuidad de la visión restrictiva de la contratación externa».
Volkswagen está eliminando puestos de trabajo en la producción tradicional de motores de combustión y componentes, al tiempo que genera empleo en las áreas de nueva creación. «Tenemos que mirar con cuidado: ¿Qué habilidades tenemos, dónde podemos mejorar?», alertó Cavallo.
«Y, paralelamente, ¿dónde tenemos que proveer (de personal), si es necesario? Pero si tengo a alguien que ya está a bordo y ha sido formado, ¿por qué deberíamos contratar a alguien de fuera?», subrayó.
Volkswagen ya ha planteado la transición de la clásica construcción de coches a las llamadas «plataformas de movilidad». En parte, todavía hay que aclarar lo que esto significa para los perfiles laborales, puntualizó Kilian. En términos de desarrollo técnico, dijo, la empresa ya ha avanzado mucho.
«Más allá de eso, estamos trabajando con una perspectiva general: ¿Dónde se producen acumulaciones, dónde recortes, cómo damos forma a la reestructuración, qué significa eso para la cualificación? ¿Y qué habilidades aportan los empleados más allá de las cualificaciones convencionales?», agregó.
En su sede de Wolfsburgo, muy infrautilizada debido a la crisis provocada por la escasez de microchips, Volkswagen espera un nuevo impulso con el proyecto Trinity, que dominará a partir de 2026.
Se trata de una gran renovación, dijo Kilian sobre los planes para la central del grupo: «Esto supone un enorme esfuerzo en materia de personal, ya que en los próximos años también capacitaremos a miles de personas en desarrollo técnico».
Todavía quedan «muchos deberes por hacer», subrayó por su parte Cavallo, «así que me alegro de que la cuestión de la planificación estratégica de los recursos humanos se impulse por fin de forma coherente».
Volkswagen también ofreció a algunos empleados la jubilación anticipada o parcial. «Reclamamos que la próxima generación se acoja a la jubilación parcial antes de lo que le correspondería», precisó Cavallo.