El mundo de la impresión, a pesar de la gran inversión que se le supone por parte del usuario, goza de potentes y asequibles impresoras como la Epson Expression Home XP-3100. Una máquina competente 3 en 1 cuyos cartuchos XL, que hallan su razón en el ahorro, son respuesta a la fuerte inversión que dedica la marca a I+D y que se traduce en el mundialmente conocido e incomprendido encarecimiento de la tinta.
Imprimir bien y barato. Epson Expression Home XP-3100
Las impresoras son ese fiel acompañante de prácticamente cualquier empresa, así como del mismísimo hogar. Tanto si su objetivo es el de imprimir documentación de gran relevancia, como el de presentar un trabajo o disponer de las fotografías de las vacaciones en formato físico. Las impresoras han evolucionado hasta conseguir una gran capacidad, desde el papel de fotografía satinado hasta la impresión en 3D. Y si cabe hablar de asequibilidad y rendimiento, es preciso mencionar la potente impresora Epson Expression Home XP-3100.
Esta impresora de la reconocida marca Epson está capacitada para operar de forma óptima tanto para labores cotidianas, como de suma importancia. Su compacto diseño 3 en 1 incluye una pantalla LCD con múltiples funciones, escáner e impresión a doble cara y de gran viveza cromática. Apta también para su uso remoto mediante aplicaciones para dispositivos inteligentes. Haciendo especial hincapié en su minimización de los costes de impresión, sin comprometer jamás su calidad, invirtiendo en tintas XL para un mayor alcance de usabilidad. Una impresora competente al atractivo precio de 87’01€.
Retomando la inversión en tinta que supone una impresora, como los cartuchos Epson Expression Home XP-3100, cabe mencionar que la compatibilidad es siempre una opción. En algunas plataformas como Quecartucho.es pueden adquirirse cartuchos compatibles epson xp 3100 a un módico precio en tamaño XL, además de muchas otras marcas más. Y es que cuando se trata de tinta de impresión, buscar la opción más económica puede ser un salvavidas cuando la labor de la impresora augura horas y horas de trabajo.
La tinta de impresión: El oro de colores en estado líquido
Uno de los grandes misterios que habita el imaginario de todo ciudadano es por qué la tinta de impresora es tan sumamente cara. Algo que, realmente, es cierto, superando por litro el precio de la gasolina, algunas bebidas alcohólicas de lujo e incluso perfumes de renombre. La respuesta, sin embargo, es más que evidente. Según Epson, el elevado precio de la tinta de impresora radica en la alta inversión en I+D, en la que la misma marca invierte 1 millón de euros al día. O dicho de otro modo, disfrutar de tecnología punta cómodamente desde casa, tiene sus merecidos costes adicionales.
Es por dicho motivo que Epson recomienda emplear cartuchos XL, a fin de ahorrar algo más de dinero sin perjudicar la capacidad de la impresora. La diferencia entre, por ejemplo, los cartuchos compatibles Epson 603 y Epson 603XL es la cantidad de tinta. En este sentido, cuanto a tinta negra, Epson 603XL goza de 8’9ml de tinta respecto a los 3’4ml de Epson 603. Pero si es preciso ahorrar un poco más, la plataforma antes mencionada, ofrece también en su web tinta compatible epson 603, tanto en su versión estándar como XL.
Aunque el oro líquido que aviva el circuito intravenoso de las impresoras varíe a lo largo del tiempo, definiendo su calidad y precio para ajustarse a toda necesidad, todavía se desconoce cómo funcionará la impresora del futuro. De hecho, el acto de imprimir, gracias a su aplicación 3D, ha permitido múltiples diversificaciones que abrazan incluso los ámbitos de la construcción y la gastronomía. No obstante, para nada un hecho sorprendente. Teniendo en cuenta que ya desde sus inicios, la impresión tiene como objetivo revolucionar todo lo posible el mundo.
De la imagen de Buda al corazón funcional
La primera impresión documentada puede situarse en China antes del año 220, como método para estampar la ropa y más adelante para imágenes de Buda y papel moneda. Del mismo modo, Egipto cuenta con hallazgos hacia los siglos VI o VII. Sin embargo, sus verdaderos punto de inflexión y detonante nacen del orfebre Johannes Gutenberg, con la predecesora de los actuales sistemas de impresión en el año 1450. Agarrando más impulso con la litografía de Aloys Senefelder cuya invención ha derivado en el actual sistema de impresión ófset.
Pero no conforme con la impresión sobre papel u otros formatos, el ingenio del ser humano ha trascendido el preferente hábitat de las impresoras para hallar su hito en la tercera dimensión. Las impresiones en 3D son ya utilizadas incluso en sanidad, pudiendo imprimir órganos artificiales y prótesis con las que adaptarse mejor a los pacientes que lo requieren. Actualmente, la impresión mediante ondas de sonido también está encontrando su espacio. Empleando el sonido para generar gotas de líquidos cuya utilidad radica tanto en la impresión común, como en la creación de microcápsulas para medicamentos.
El mañana vaticina una infinidad de cambios más. Quién sabe qué métodos y para qué fines servirán las impresoras del mañana. Su ambicioso alcance de utilidad es estremecedoramente amplio. Si hoy la creación de una impresora puede coexistir en el organismo humano, ¿qué será en un futuro? Lo que queda claro es que la labor del universo de la impresión goza de una gran creatividad y ánimos de innovación a cuya historia debe añadirse la cronología y el legado de una de sus marcas de más renombre: Epson.