Por lo general, todas las personas que viven en comunidades de vecinos se tienen que enfrentar a esta dura papeleta en alguna ocasión
Convertirse en presidente de una comunidad de vecinos es probablemente, una de las tareas más complejas a las que tienen que enfrentarse las personas que viven en un piso. Tarde o temprano, el momento de ser presidente llega a todas las viviendas del edificio, por lo que es conveniente conocer una serie de pautas que ayuden a llevar este importante cargo de administración de la comunidad con solvencia.
Cuando una persona es nombrada presidente de la comunidad por primera vez, lo más habitual es que desconozca por completo las tareas y las responsabilidades que tiene que asumir a la hora de dirigir la comunidad de vecinos. Por ello, en España existe la Ley de Propiedad Horizontal (LPH), la cual recoge de forma detallada todas las tareas del presidente y los cargos que deben formar parte de una comunidad de propietarios.
Dentro de una comunidad de vecinos hay dos órganos básicos e imprescindibles que son la Junta de propietarios y el presidente de la comunidad, a los que se unen las figuras del vicepresidente, del secretario y del administrador. En muchos casos, el presidente asume varios cargos al mismo tiempo, aunque cada vez es más frecuente ahorrar gestiones mediante la contratación de un administrador de fincas profesional y de confianza.
Principal consejo para ser presidente de una comunidad de vecinos
El cargo de presidente de una comunidad de vecinos es similar al de un presidente del Gobierno o el de un presidente de una Comunidad Autónoma, aunque en menor medida (tiene muchas menos responsabilidades), ya que tienen que hacerse cargo de una gran cantidad de tareas de administración que en su caso tienen que ver con las viviendas del edificio.
Si se rompe una tubería general, si se avería el ascensor o si se rompe alguna infraestructura común (escaleras, puertas, ventanas, etcétera), el presidente de la comunidad tiene que actuar como representante de todos los vecinos. Es decir, tiene que encargarse de solventar estos problemas, ya sea poniéndose en contacto con una empresa de reparación especializada o llamando al seguro contratado.
Para no tener que estar detrás de todas estas gestiones (aunque si de la observación de los mismos), lo más recomendable es contratar a un administrador de fincas que se encargue de llevarlas a cabo. Hoy en día existen muchos administradores de comunidades de vecinos, y la mayoría de ellos se anuncian en páginas web a través de Internet, por lo que es muy sencillo encontrar a un especialista que gestione la administración de fincas en Barcelona, Madrid u otra ciudad de España.
Cómo se nombra al presidente de una comunidad de vecinos
El presidente de una comunidad de vecinos es el máximo representante de todos los vecinos que forman parte del edificio (tanto en juicio como fuera de él), por lo que la estampación de su rúbrica en diversos documentos obliga a todos los vecinos a cumplir con lo firmado. El presidente de una comunidad de propietarios tiene por tanto, el poder de adoptar decisiones o medidas urgentes que afectan de manera directa a la comunidad en un determinado momento.
Pero, ¿cómo se elige al presidente de una comunidad de vecinos? Para nombrar al presidente de una comunidad de propietarios es necesario convocar una Junta General Ordinaria anual (la cual es obligatoria, tal y como recoge la Ley de Propiedad Horizontal), en la cual se tratan los temas más importantes que afectan al edificio y se lleva a cabo la renovación de los cargos de representación (presidente, vicepresidente, secretario, etcétera).
El proceso de elección es bastante sencillo, ya que puede ser seleccionado directamente por los propietarios (si se presentan candidatos), o mediante un turno rotatorio o sorteo. El nombramiento es obligatorio, por lo que ningún propietario puede eximir la responsabilidad de asumir el cargo de presidente de la comunidad, aunque existe la posibilidad de renunciar al cargo por distintas razones justificadas (el propietario tiene que solicitar el relevo al juez dentro del mes siguiente a su nombramiento).
Obligaciones y tareas del presidente de una comunidad de propietarios
Un presidente de una comunidad de propietarios tiene que hacer frente a una serie de tareas y responsabilidades bastante amplias, aunque algunas de las más comunes tienen que ver con la acción de ordenar trabajos y obras que resulten necesarias para el adecuado mantenimiento y conservación del inmueble. Dentro de esta tarea de ordenación de obras, el presidente de la comunidad también debe encargarse de la supervisión de los trabajos para que se realicen de manera correcta.
Por otro lado, el presidente de la comunidad también tiene que encargarse de supervisar que no se cometan actividades prohibidas o molestas para el resto de vecinos en los inmuebles, y por ende, de su inmediata cesación. Si estos problemas fueran a más, el presidente de la comunidad de vecinos tiene la capacidad de convocar una Junta Extraordinaria en la que estos hechos se recojan como puntos del orden del día para ser resueltos cuanto antes.