(dpa) – En Europa los que están en onda y apuntan a tener flexibilidad ya no compran ni alquilan automóviles. Contratan un abono con tarifa plana para cuando lo necesitan. Comprar un coche en muchos sectores de Europa parece cosa del pasado, como si hubiese sido una moda que ya no va. Así como la música se consume en streaming y las películas se comercializan de un modo totalmente distinto, la industria automotriz está viviendo fuertes cambios.
«En el mercado alemán ya existen muchas ofertas de este tipo», comenta el asesor Jonas Wagner. Hay empresas como Carminga, Carship, Cluno, Faaren, Finn, Like2drive, Sixt y 12Neuwagen. «Y se suman todo el tiempo start-up nuevas».
A esos emprendimientos se han sumado automotrices como Porsche, Cadillac y Audi, aunque por ahora lo hacen sólo a nivel regional y a modo de prueba. Por el momento ofrecen programas de abono limitados. Sólo Volvo puso todos los motores en marcha y lanzó una propuesta para el sector en toda Alemania.
¿Qué cubre el abono?
Por lo general todas las compañías que están ofreciendo este servicio se manejan de un modo similar. Es muy fácil acceder al auto. El abono cubre todos los costos de uso, mantenimiento, repuestos y servicio. Todo eso está incluido en el precio mensual. Lo único que debe asumir cada usuario son los gastos de combustible, explica el experto Ferdinand Dudenhöffer. «Es como un alquiler full-service para clientes privados», añade.
Muchas compañías incluso permiten cambiar el vehículo durante el período en el que está vigente el abono. En verano se pude elegir un descapotable, para las vacaciones una combi y en invierno un SUV. Es algo con lo que publicitan las empresas, explica Wagner, que sin embargo advierte que no es bueno tener demasiadas expectativas, porque en muchos casos las flotas aún son pequeñas, lo que reduce la flexibilidad ante las demandas de los abonados.
¿Qué costo tiene un abono?
Depende de la categoría de coches que uno elija y de la duración del contrato. Por lo general son de pocos meses. Las tarifas, por su parte, pueden variar. En Alemania se puede conseguir un coche pequeño por 250 euros al mes y un modelo de lujo por 1.700.
¿A quién le conviene tener un abono?
Los especialistas dicen que este tipo de abonos son muy útiles para quienes descartan comprarse un auto, por las razones que sea, quieren tener flexibilidad a la hora de elegir el coche que necesitan y que pueden planificar cuándo y cuánto usarán el vehículo.
También es una buena opción para quienes tienen pensado comprarse un auto y primero quieren probar el modelo durante un tiempo más bien prolongado.
Otros lo buscan como solución transitoria cuando no pueden acceder de inmediato al coche al que apuntan, sea porque tienen que reunir el capital o porque tiene largas esperas. Y también es una buena opción para quienes prefieren tener una vida simple, planificable y cómoda, apunta Dudenhöffer. «De esta manera andar en coche es tan fácil como comprar algo en Amazon», dice el experto. «Con un par de clicks ya estás sentado en el coche que quieres y no tienes que pensar ni cómo lo venderás después ni cómo le harás los arreglos cuando se rompa algo».
Por supuesto, si uno finalmente elige este modo de andar, debe leer con mucho detenimiento el contrato y no dejarse apurar por los tiempos de la web. Las trampas clásicas se esconden en la pregunta de si permite utilizarlo con kilómetros libres o no y si hay que pagar un importe para iniciar el contrato. Eso suele figurar en la letra pequeña. Otro punto a tener en cuenta es si se cobra algún monto por la entrega y el retiro del coche al inicio y fin del abono.
«También es importante evaluar con detenimiento qué cubre el seguro y si hay algún tipo de restricción sobre quién está autorizado a conducir el auto», apunta Wagner. «¿Pueden conducir principiantes o sólo personas que tengan la licencia desde hace tiempo? ¿Está permitido salir al extranjero o es necesario contratar un seguro adicional? Son preguntas que es necesario aclarar antes de firmar», recomienda el experto.
Suena complicado, pero los que están en el rubro, como Dudenhöffer, están convencidos de que es el modelo del futuro. «En diez años gran parte de los dos coches nuevos que se compran actualmente serán abonos. El mercado está revolucionándose».
Por Thomas Geiger (dpa)