Oviedo, 6 jun (dpa) – El biólogo sueco Svante Pääbo fue distinguido hoy con el premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica por haber abierto un nuevo campo de investigación, la paleogenómica, informó el jurado en la ciudad española de Oviedo.
«Sus descubrimientos obligan a reescribir la historia de nuestra especie», reza el acta, que destacó los «métodos» desarrollados por el galardonado «para el estudio del ADN antiguo», que «han permitido la recuperación y el análisis del genoma de especies desaparecidas hace cientos de miles de años».
«Particularmente relevante es la secuenciación del genoma de los neandertales y el hallazgo de que genes de estos y otros humanos extintos forman parte del acervo genético de la Humanidad».
Pääbo (Estocolmo, Suecia, 1955) es considerado como uno de los fundadores de la paleogenética.
Hoy, en su primera reacción tras recibir el premio Princesa de Asturias, dijo sentirse «muy honrado» y dedicó el galardón a «los muchos estudiantes y científicos que, con su duro y a veces frustrante trabajo, han hecho posible recuperar genomas de organismos extintos o hace mucho tiempo fallecidos».
«Siento además, humildad, cuando contemplo el elenco de distinguidos académicos y científicos que lo han recibido con anterioridad», expresó en un mensaje desde Leipzig (Alemania) difundido por la Fundación Princesa de Asturias, que otorga los galardones.
En los años 80, Pääbo demostró que podía analizar el ADN de momias egipcias y estableció métodos para rescatar secuencias de ADN antiguo, una labor complicada por la degradación y modificación por procesos químicos que pueden originar errores durante su replicación.
El biólogo sueco ha dirigido el proyecto de secuenciación completa del genoma del neandertal, especie extinguida hace aproximadamente 30.000 años, cuyo borrador se publicó en 2010 en la revista «Science» y cuyo resultado definitivo fue presentado en 2013.
En 1997 rescató secuencias de ADN mitocondrial de muestras de un espécimen del tipo neandertal, lo que supuso la primera vez en la que se extrajeron datos genéticos moleculares de un fósil de homínino.
En 2004, adaptó y aplicó técnicas de alto rendimiento de secuenciación del ADN a ADN antiguo, lo que abrió la posibilidad de analizar el genoma completo de organismos extinguidos. Al año siguiente, lanzó el proyecto de secuenciación del genoma neandertal, cuyo borrador se presentó en 2010 y su versión definitiva en 2013.
Mientras trabajaba en este proyecto descubrió, a través del estudio de unos restos procedentes de Siberia, un nuevo tipo de homínino desconocido hasta ese momento, al que se conoce como denisovano (por el nombre de la cueva donde se hallaron los restos), el primero extinguido y descrito exclusivamente a través de datos genéticos.
Pääbo es miembro de la Organización Europea de Biología Molecular (EMBO), la academia Europea, la Nacional de Ciencias de Estados Unidos y de la Royal Society. Ha recibido reconocimientos como el Premio Louis Jeantet de Medicina (Suiza, 2005), el Kistler Prize (Estados Unidos, 2009), el Keio Medical Science Prize (Japón, 2016) o el Human Frontier Science Program Organization Nakasone Award (2018).
Desde 1997 es, además, director del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig (Alemania). Antes fue profesor en la Universidad de Múnich y en la de Leipzig.
Su candidatura se impuso hoy a otras 38 de 17 países en la vigente edición de los Premios Princesa de Asturias, otorgados por la fundación del mismo nombre y considerados «los Nobel españoles».
Los galardones, ocho en total, serán entregados por el rey Felipe VI en una ceremonia prevista en octubre en Oviedo. Cada uno de ellos está dotado con 50.000 euros y una escultura de Joan Miró.
Además de Pääbo, en esta edición han sido galardonados el cineasta estadounidense Martin Scorsese (Artes), la periodista mexicana Alma Guillermoprieto (Comunicación y Humanidades), la ONG Amref Health África (Cooperación Internacional), la escritora francesa Fred Vargas (Letras) y el filósofo estadounidense Michael Sandel (Ciencias Sociales).