(dpa) – Los envases plásticos de helado suelen ser muy populares para que, una vez que la familia se encargó de vaciar su contenido, congelar sobras de sopa o carne con salsa. De hecho, en numerosos congeladores se amontonan estos recipientes.
Pero ¿son realmente apropiados para este fin estos envases de plástico? «No, porque fueron fabricados para ser rellenados con helado y no son aptos para el almacenamiento de otros productos alimenticios», advierte Kerstin Etzenbach-Effers de la central de consumidores del estado federado alemán de Renania del Norte-Westfalia.
Sin embargo, son muchos los consumidores que piensan que es una pena descartar estos envases plásticos después de un solo uso. «Quien llene este recipiente por ejemplo con una sopa caliente y grasosa se arriesga a que se desprendan químicos del envase y pasen al alimento«, explica la licenciada en química.
En particular se refiere a aditivos como plastificantes o estabilizadores de rayos UV, pero también a sustancias que no se añadieron intencionadamente al plástico, sino que se producen como subproductos durante la fabricación.
En una denominada declaración de conformidad, los fabricantes de envases de helado garantizan que el embalaje es seguro para su utilización a muy bajas temperaturas, pero no más allá de eso.
¿Y cuáles son entonces los envases más indicados? «Existen recipientes de plástico reutilizables, que son fabricados especialmente para congelar. Deben ser de polipropileno. Son reconocibles por el sello impreso PP», señala la científica.
Pero también los envases de vidrio son aptos para congelar. «Sin embargo no deben ser llenados hasta el borde, sino que debe haber entre uno y dos centímetros de margen, porque el contenido se expande al congelarlo», explica Etzenbach-Effers.
Asimismo debe evitarse colocar el vidrio helado en agua caliente. «Si se lo calienta de menos 18 grados a 100 grados, puede explotar«, advierte.
En general, independientemente del congelamiento, la especialista aconseja no guardar los alimentos en plástico. Para ello existen recipientes de vidrio, porcelana o acero inoxidable, que son más apropiados.
Pero también en este caso es preferible elegir tarros con obturadores de tapa libres de PVC. En general estos son de color azul.
La mantequilla de hierbas tampoco debe ser almacenada en envases plásticos. «Las sustancias nocivas liposolubles pasan más fácilmente a sustancias grasas y aceitosas«, advierte la experta.
Asimismo las sustancias nocivas migran más rápidamente a los alimentos calientes. Por esa razón, la química señala que no deben calentarse comidas dentro de recipientes plásticos en el microondas.