La muerte de un familiar es uno de los eventos más traumáticos que puede vivir cualquier persona. La ausencia de un ser querido deja un vacío indescriptible en familiares y amigos. Los seres humanos por naturaleza se resisten a aceptar que alguien ya no esté, y se agudiza mucho más cuando la pérdida se produce bajo circunstancias trágicas o inesperadas.
Independientemente de las causas que originan la muerte, los sentimientos de vacío y tristeza desencadenan un profundo dolor. Experimentar sufrimiento ante una pérdida, es completamente normal. Sin embargo, los mecanismos de superación son distintos para cada caso.
Jamás se olvidan
Con el paso del tiempo, el recuerdo de un ser querido puede ser una experiencia gratificante. El cambio de actitud es primordial en este sentido. La visualización de fotografías o escribir momentos importantes, evita el olvido y mantiene al familiar en la memoria de una manera adecuada. Enfocar la atención en los aspectos positivos, anécdotas felices, el aprendizaje obtenido u otros, evitarán la pena y fomentarán los sentimientos de alegría.
Un delicado recordatorio
Existen muchas maneras de recordar a los que ya no están. Los Colgantes para cenizas son joyas diseñadas para colocar una pequeña parte de las cenizas de los familiares, previamente incinerados, y se pueden llevar a todas partes en forma de pulseras, collares o anillos. Esta innovadora presentación mantiene la esencia de los que ya no están y puede ayudar a generar sensaciones de paz y tranquilidad. Por otro lado, llevar dichos accesorios en todo momento puede ser reconfortante y se considera un hermoso homenaje para los fallecidos.
Los colgantes para cenizas se adaptan a los requerimientos de los interesados en diversos modelos y materiales. Son joyas con un pequeño tapón por donde se agrega parte de las cenizas y se cierra herméticamente. Es fácil y sencillo de usar. Se elaboran en plata y en oro, que son los mejores en calidad y durabilidad, y su valor en el tiempo se mantiene. La selección de la joya dependerá del gusto de cada persona y la satisfacción que produce, supera en mucho a la inversión. Viene con todo el kit necesario para poder guardar las cenizas y el colgante quede sellado.
Las joyas funerarias han sido confeccionadas por los mejores especialistas en joyería y se adaptan a las necesidades del cliente. Los corazones, lágrimas o cruces son los más comunes, sin embargo, existen variadas formas según la petición del comprador. En el caso de aquellos que desean recordar a sus mascotas por siempre, también existen modelos para tal fin.
Ser feliz tras el duelo
La búsqueda de la felicidad dependerá en gran medida de la fuerza de voluntad de cada uno. La ausencia de alguien puede detonar muchos sentimientos de vacío y tristeza. La superación de las pérdidas emocionales es un verdadero reto. El tiempo es un extraordinario aliado ante este tipo de situaciones, y permite potenciar nuevas vivencias.
La creencia de que es imposible sentirse mejor después del fallecimiento de un familiar es falsa. Recuperar el control de la vida es posible, una vez que el duelo pasa, los esquemas mentales y la culpa por volver a ser feliz tras el duelo, se pueden tratar perfectamente.
Con ellos, en cualquier lugar
Recordar de forma saludable al difunto requiere de trabajo y esfuerzo. La posesión de cualquier detalle que permita sentir su presencia producirá calma, bienestar y armonía. Algunos objetos dejados por ese ser especial son imposibles de trasladar de forma permanente, dado su tamaño y peso.
La incorporación de accesorios al vestuario aporta un valor agregado y marcan la diferencia. La apariencia personal dice mucho sobre los sentimientos que reposan en el interior de los seres humanos. Con los colgantes para cenizas se pueden lograr dos cosas importantes: verse bien por fuera y sentirse bien por dentro.
En definitiva, la muerte es una realidad inevitable a la que todos los seres vivos están expuestos. Afrontar las pérdidas y superarlas, requiere de determinación y valentía. Cada persona vive el duelo de una manera diferente. Puede que algunas estrategias funcionen para algunos, y para otros, no tanto.
Llevar consigo un accesorio que permita recordar a ese ser amado es una técnica que ha minimizado el dolor de la ausencia a muchas personas en duelo. Los difuntos viven en la memoria de quienes los recuerdan y estarán presentes en los corazones por siempre.