Muchas personas son trans-económicos sin ni siquiera conocer el significado de la palabra. Se trata de personas que tienen gustos de ricos pero que están atrapados en un cuerpo de tieso. En pocas palabras, son personas que aman la buena vida, pero son diligentes, prudentes e inteligentes a la hora de gastar el dinero.
Por lo general este tipo de personas suelen tener éxito en todo lo que emprenden porque tienen un alto nivel de consciencia de la importancia de tener dinero ahorrado y por esto, generalmente son muy audaces para conseguir las cosas que necesitan, pero a buenos precios. No se van con lo primero que ven en oferta, ni se dejan seducir por cualquiera. Al contrario, tienen gustos refinados y costosos, pero saben escoger lo mejor.
En este sentido, para este tipo de personas funciona muy bien aquello que se conoce como cooperativa de viviendas que consiste en comprar o adquirir un inmueble, pero a precio de coste y con todas las garantías aseguradas. En pocas palabras, una persona puede conseguir la casa de sus sueños al mejor precio del mercado y con una facilidad increíble. ¿No es maravilloso?
Para explicarlo de una manera más sencilla se puede decir que la cooperativa de vivienda consiste en adquirir una vivienda en las mejores condiciones posibles tanto a nivel de calidad como de precio. Por lo tanto, en aras de conseguir este objetivo es fundamental la eliminación de intermediarios, bien sean agencias, agentes inmobiliarios independientes, entre otros.
De todas maneras, si quieres aprender a ser más ahorrativo, llevar mejor tus finanzas y no hacer gastos innecesarios que descuadren tu presupuesto, a continuación, te ofreceremos algunos consejos:
Compra sólo lo que realmente necesites
Después de las fiestas navideñas y el desembolso que hacemos en regalos y demás, llega enero, uno de los meses más difíciles para la economía familiar, así que no malgastes y evita caer en compras innecesarias. Lo mejor es elaborar una lista en la que incluyas elementos que realmente hacen falta y evites así la tentación de comprar caprichos.
Establécete un presupuesto y cúmplelo
No gastes sin tener consciencia de cuál es tu presupuesto. Esto te ayudará a evitar sorpresas a final de mes, cuando te lleves las manos a la cabeza y te arrepientas de todo lo que gastaste. Por ello es recomendable decidir previamente la cantidad exacta de dinero que puedes gastar en compras.
No compres todo lo que veas en descuento
Ya sabemos que las ofertas siempre son llamativas, pero ten cuidado porque comprar artículos en oferta no implica necesariamente haber comprado bien. Recuerda que a veces los precios bajos son sinónimo de peor calidad, así que es mejor comprobar que la prenda en cuestión no tiene alguna falla y si vale la pena realmente comprarla.
Lee las etiquetas
Otro consejo importante es que cuando compres, por ejemplo, ropa, leas bien la etiqueta de la prenda con detenimiento, tanto su composición e instrucciones de lavado y mantenimiento, como para poder comparar la diferencia entre el precio original y el rebajado.
Invierte sólo en cosas que sí vayas a usar
Muchas veces compramos por comprar, pero en el fondo sabemos que lo que estamos comprando no lo vamos a utilizar necesariamente. Por eso, si quieres aprender a ahorrar más dinero tienes que manejar tus gastos y comprar sólo aquellas cosas que sabes y estás muy seguro de que vas a utilizar. De nada sirve comprar algo que luego guardarás en un cajón para siempre o sólo utilizarás muy de vez en cuando.