Barcelona, 15 abr (dpa) – El ex jefe del Ejecutivo catalán Carles Puigdemont apostó hoy por «evitar nuevas elecciones» en Cataluña buscando «soluciones» que permitan formar Gobierno en la región, pero no descartó por completo que haya que convocar nuevos comicios.
«Tenemos que buscar las fórmulas para que no haya elecciones. Si no es posible Jordi Sànchez, debemos proponer otro candidato», afirmó Puigdemont en una entrevista concedida a TV3, la televisión pública catalana, sin ofrecer nombres ni detallar su propuesta para desbloquear la investidura de un nuevo presidente de la Generalitat.
«Tenemos hasta el día 22 de mayo, es la fecha límite. No hará falta apurar hasta el final, pero dejemos trabajar un poco. Un poco de confianza, por favor. Tenemos tiempo para encontrar soluciones que, por un lado, respeten el mandato de la gente, y, por otro, evite ir a elecciones», continuó el líder independentista.
«No queremos elecciones, pero es ingenuo pensar que hay riesgo cero. Hay otra parte que juega que es el Estado y tenemos que contemplar la posibilidad de que haya un interés de abocarnos a unas elecciones», avisó Puigdemont desde Berlín, donde reside actualmente.
El ex presidente del Gobierno catalán, destituido por el Ejecutivo de Madrid en octubre por encabezar el proceso independentista, se encuentra en Alemania a la espera de que la Justicia de ese país decida si lo entrega o no a España, donde fue procesado por delitos de rebelión y malversación de fondos en relación con el proceso separatista impulsado en la región española.
Puigdemont fue detenido en el país germano el 25 de marzo en virtud de una orden europea de arresto emitida por la Justicia española. Un tribunal alemán decidió la semana pasada descartar el delito de rebelión en su caso y, tras 12 días en la prisión de Neumünster, liberar al político catalán a cambio de una fianza de 75.000 euros.
«Ellos quieren un Gobierno de rodillas que no les podemos dar porque, entonces, la moción de censura sería de la gente. Tenemos que formar un Gobierno que responda a los resultados del 21 de diciembre», sostuvo Puigdemont en la primera entrevista tras su liberación.
Después de las elecciones que se celebraron en Cataluña el pasado 21 de diciembre convocadas por el Gobierno español, el ex jefe de la Generalitat fue el candidato que más apoyos obtuvo para formar nuevo Gobierno en la región situada en el noreste de España. Pero no pudo ser investido al encontrarse prófugo de la Justicia española en Bélgica.
Los posteriores intentos de investir a Jordi Sànchez y Jordi Turull, que integraron la misma lista que Puigdemont, también fracasaron al hallarse ambos en prisión preventiva acusados de delitos relacionados con el proceso independentista y después de que el juez que instruye la causa no les permitiera acudir al pleno de investidura.
«Eso es un fraude democrático», aseveró Puigdemont tras asegurar que se sigue sintiendo «el presidente legítimo» de la Generalitat. «Los 135 diputados del Parlamento catalán tienen todo el derecho a ser elegidos presidente, a no ser que haya una condena firme. No puede haber diputados de primera y de segunda».
El ex jefe del Ejecutivo catalán sostuvo que «el Gobierno español no juega con cartas limpias» y que «el Estado español se niega, una y otra vez, a aceptar lo que el Parlamento catalán, que es el representante del pueblo, quiere», circunstancia que calificó de «anomalía democrática».
Puigdemont aseguró asimismo que el juez de la Audiencia Nacional española que instruye la causa contra los políticos independentistas «traspasó líneas rojas» y animó a los catalanes «a no plegarse a su voluntad».
«La función de un juez no es intervenir en el poder ejecutivo; esa es una línea roja que no debemos permitir pasar. Por más que haya un juez que se ultrapase en sus competencias, no podemos plegarnos a su voluntad. El Parlamento hizo muy bien en presentar una querella contra él», concluyó Puigdemont.
La entrevista, que se prolongó durante más de una hora, se emitió horas después de que más de 300.000 catalanes marcharan en Barcelona convocados bajo el lema «por los derechos y las libertades, por la democracia y la cohesión» y para pedir la liberación de los que los independentistas consideran «presos políticos».
«Hoy hubo una nueva movilización masiva en Barcelona y la gente no se moviliza para dar apoyo a unos criminales golpistas sino porque se siente amenazada en sus derechos», comentó al respecto Puigdemont, antes de anunciar que, el próximo septiembre, publicará un libro para una editorial belga.
Según adelantó, en él intentará explicar «que en Cataluña no hay un problema sino una oportunidad para Europa», al tiempo que contará «el fascinante y maravilloso» proceso de «un pueblo que se autoorganiza para expresar de manera muy democrática su malestar».
Por Noelia Román (dpa)