El gobierno mexicano ha reunido bajo un mismo concepto a 132 pueblos de su territorio que mantienen una serie de características y particularidades exclusivas que le dan sentido a la idiosincrasia de los habitantes de México, mostrando en su conjunto la identidad nacional.
Un pueblo mágico en México es un lugar que mantiene viva su memoria, sus símbolos y leyendas. Son poblados que fueron protagonistas en algún momento histórico en la construcción de la nación, espacios donde tuvieron lugar hechos trascendentes. Estas poblaciones muestran la verdadera esencia mejicana en todos sus rincones, mientras se respira una magia especial que emana de su cultura y sus tradiciones. No se puede entender al verdadero México si no se conocen estos pueblos mágicos.
Es este un programa nacional que permite mantener esta riqueza, conocer desde los festejos en Álamos hasta dónde hospedarse en Mazamitla, pasando por los espacios naturales protegidos en Chiapas o los monumentos que merecen visitarse en Guadalupe. Una guía, en definitiva, imprescindible para disfrutar con conocimiento de causa de todo lo que ofrece un país como México.
Los 5 pueblos más visitados de la ruta mágica de México
Abarcar los 132 pueblos que componen esta guía resulta una hazaña de difícil cumplimiento. En este artículo se ofrece un breve repaso de los 5 más visitados con el objeto de ofrecer una ligera idea de lo que espera al turista cuando se embarque en la aventura de conocer al verdadero México.
1.Huasca de Ocampo, en Hidalgo
De arquitectura colonial y magnífica solidez y calidez de sus calles empedradas, pasear por este pueblo es todo un placer para los sentidos. Desde su centro histórico con sus características casas a dos aguas hasta una ubicación extraordinaria en medio de montañas y bosques, Huasca de Ocampo tiene motivos de sobra para ser uno de los pueblos más visitados, tanto por extranjeros como por los propios mexicanos.
Entre sus particularidades cabe destacar el monumento natural de los Prismas Basálticos, considerado como una de las 13 maravillas de México. Se trata de unas columnas basálticas que aparecieron hace unos 2,5 millones de años como resultado de un lento enfriamiento de coladas de lava. También resulta interesante una visita a las haciendas prehispánicas que perduran intactas y descubrir las leyendas visitando su famoso Museo de los Duendes.
2.Tepoztlán, en Morelos
Sin lugar a dudas, Tepoztlán merece más que ningún otro el calificativo de mágico. Es un pueblo ideal para una escapada en la que llenarse de la energía natural que emana el lugar. Famoso por sus helados con sabor a tequila o a pétalos de rosas, el pueblo descansa en las faldas del cerro Teposteco, en cuya cima se erige una pirámide prehispánica de la que emana y fluye la energía positiva que inunda este lugar. La pirámide construida en honor al dios del Pulque (bebida típica de la región echa con maguey), Ometochtli-Tepoztécatl, se remonta a mediados del siglo doce. Es aquí donde cada 21 de marzo, en el equinoccio de primavera, turistas de todo el mundo suben para recargarse ellos mismos y sus objetos de cuarzo de energía positiva.
3.Bernal, en Querétaro
También tiene bien merecida la etiqueta este pueblo perteneciente al estado de Querétaro, en buena medida por lo excepcional de su ubicación. A pie del tercer molino más grande del mundo, la Peña de Bernal, que se formó hace más de 65 millones de años a partir de lava volcánica, es un pueblo que adquiere las condiciones ideales para la desconexión y el descanso.
Sus paisajes, dulces, artesanías y delicioso vino serán compañía ideal para recorrer sus rutas por viñedos hasta subir a la Peña para respirar un aire puro como pocos.
4.Bacalar, en Quintana Roo
El nombre de Quintana Roo es ampliamente conocido en el sector turístico de masas. Ofrece la más amplia variedad de opciones para el turista vacacional que viene en busca de playas tropicales idílicas. Bacalar está muy cerca de esa costa sin la excesiva presencia de visitas. Es un auténtico heredero de la cultura Maya ubicado en un lugar de gran belleza natural. Todo lo que se necesita de los clásicos turísticos (cenotes, playas paradisíacas, lagos, bosques y yacimientos arqueológicos), con la tranquilidad de un pueblo tradicional mejicano.
Además de las fabulosas ruinas de Kohunlich, se podrá visitar el Cenote Azul y la Laguna de los Siete Colores, llamada de este modo por el cambio que puede apreciarse a simple vista, desde el violeta a diferentes tonos del azul. También imprescindible será conocer el Fuerte de San Felipe, un lugar emblemático en la historia de México por ser un espacio de resistencia contra la invasión de africanos, ingleses, franceses y holandeses.
5.Izamal, en Yucatán
Conocida con el sobrenombre de la mágica ciudad amarilla, es un emplazamiento ideal para descubrir el cercano yacimiento arqueológico de Chichén Itzá, el corazón del Imperio Maya. Relajación, cultura y excelente gastronomía esperan a todo aquel que llegue a este pueblo.
5+1 Mención especial para Mazamitla, en Jalisco
Mazamitla tiene un secreto que no es compartido por ningún otro pueblo mágico en todo México; sus cabañas en plena sierra del Tigre, un espacio único para sentirse como un explorador en la naturaleza más salvaje. Su pueblo, de una belleza tranquila, invita a ser recorrido lentamente, adaptándose al ritmo que allí impera. Después solo queda disfrutar de rincones como el Jardín encantado y El Salto, La Iglesia de San Cristobal, el bosque de La Zanja o internarrse en la mencionada Sierra del Tigre.
Para disfrutarlo en toda su esencia se hace imprescindible pasear en calesa y subir a la pirámide Kinich-kakmó. Otras visitas interesantes son el Centro Cultural y el Convento de San Antonio de Padua… Pero, sobre todo, hay que disfrutar de la excelsa gastronomía yucateca, su cochinita pibil no tiene comparación en todo el mundo, los papdzules o los tamales con xtabentún y pozol de coco también son famosos.