La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), informó recientemente a través de su portavoz, Elizabeth Throssell, que al menos 62.000 personas han abandonado Nicaragua durante el último año debido a la crisis política y social que vive el país.
«En este flujo de refugiados muchos de ellos han recurrido a cruzar irregularmente la frontera para evitar ser detectados, a menudo caminando durante horas a través de complicados terrenos», aseguró la portavoz de ACNUR, Elizabeth Throssell.
Además, la representante de ACNUR señaló que la situación en Nicaragua no sólo ha ocasionado la salida de adultos mayores sino también de familias enteras con niños.
“Estos refugiados corren el riesgo de contraer enfermedades como la malaria, durante su proceso de huida”, concretó Throssell.
Finalmente, la portavoz felicitó los esfuerzos que ha hecho Costa Rica en la recepción de estos refugiados y a la hora de facilitar los trámites de asilo.
Soraya Andreina Pérez