“La maleta de cómo ser un buen croñamón” o un “Laboratorio Arqueológico” son algunas de las novedades de la programación para grupos escolares del Centro de Arte Rupestre de Tito Bustillo.
El equipamiento riosellano ofrece visitas y actividades con ayuda al transporte, en las que el alumnado de Infantil puede aprender a fabricar una vestimenta prehistórica, pintarse la cara o moverse como uno de nuestros antepasados en “La maleta de cómo ser un buen cromañón” y los escolares de Secundaria pueden recrear cómo era la vida en la Prehistoria en el “Laboratorio arqueológico”. La visita a la exposición permanente y a la Cuevona de Ardines es también una de las opciones para escolares de todos los ciclos educativos, que pueden conocer además la Cueva de Tito Bustillo, esta temporada hasta el próximo 29 de octubre.
Para los grupos escolares también se ofrecen experiencias didácticas prehistóricas que les permiten viajar por “20.000 años de consumo sostenible” con la colaboración del Centro de Formación para el Consumo de Ribadesella o por 228 millones de años en una jornada única que comienza en el Museo del Jurásico de Asturias y finaliza en el Centro Tito Bustillo en la que pueden comprender el tiempo geológico y la aparición y desaparición de especies hasta llegar a la presencia del hombre en nuestro planeta.
El Centro de Arte Rupestre pone además en marcha la IV edición del concurso escolar “En busca del cuento perdido”, una actividad que comienza en el aula y finaliza en el Centro de Arte Rupestre. Los participantes deberán aportar una propuesta de cuento en base a unas premisas previas y los autores de los cuatro relatos seleccionados podrán ver su cuento interpretado en el Centro de Arte Rupestre en el marco de la celebración del Día Internacional del Libro Infantil y Juvenil.