Ante el encarecimiento del mercado, muchos compradores han optado por dirigir sus intereses hacia las casas prefabricadas de madera. Una tipología del sector inmobiliario que se fundamenta en una gran asequibilidad junto con las posibilidades que confiere una construcción desde cero. Además, y contra cualquier atisbo de duda, sin la necesidad de dedicar más mantenimiento del que requiere una casa convencional.
Retorno a las casas de madera
A pesar de cuanto nos ha aportado al día a día las distintas vías mediante las que la arquitectura refuerza sus estructuras, las tradicionales casas de madera vuelven hoy a emerger en el mercado como una apuesta más que segura. Y no sólo por cuanto se refiere a lo económico, sino que, más allá, se establecen en nuestro estilo de vida como un retorno a la naturaleza, alejándonos del frío hormigón y del acero al que nos han acostumbrado las nuevas construcciones. Aunque, realmente, el sector de las casas de madera nos ofrece también incluso arquitecturas más modernas y que podrían competir perfectamente con cualquier otro inmueble de cemento.
En otro punto, y quizás el más importante, muchas familias han visto perjudicada su voluntad de convertirse en propietarias de una casa a causa de un precio que, en el mercado estándar, no deja de revalorizarse año tras año. Bajo una premisa de pura asequibilidad, las viviendas de madera como las que muestra FacilHouse en su buscador han ido ganando terreno en una carrera donde, al fin y al cabo, lo que importa es encontrar esas cuatro paredes a las que poder llamar hogar. Contando con múltiples modelos, tomando una de sus más sobresalientes ventajas, cuyo precio no se acerca ni por asomo al del encarecido mercado inmobiliario.
Empecemos por lo primero: la asequibilidad
Como se ha mencionado, una de las principales ventajas de las casas de madera, y la más importante atendiendo a las necesidades de todo comprador, es su ajustado precio. Dado que se trata de una vivienda prefabricada, las posibilidades son inmensas y no sólo cuanto a modelos, sino encontrando también casas modulares que poder ampliar según el espacio que precisemos. Basta con echar un vistazo a los inmuebles que ofrece cualquier servicio inmobiliario para percatarse de cuán interesante es la diferencia de precios entre un mercado y otro. Pudiendo hallar todo tipo de opciones a precios que disminuyen incluso a los 30.000€.
Asimismo, parte de la razón de su asequibilidad radica en el hecho de que, a diferencia de una casa convencional, la construcción de una casa de madera suele demorarse entre cuatro y seis meses. Una velocidad mayor a los inmuebles que requieren de estructuras de ladrillo más intrincadas o complejas. Eso sí, teniendo en cuenta, y como recuerda FacilHouse, que la fase de documentación conllevará un par de meses o tres y la licencia de obra entre uno y cuatro meses. Pese a ello, vale la pena esperar un poco más para poder disfrutar de la casa que soñamos a un precio más que razonable. Siendo necesario mencionar qué podría incluir dicha compra.
En algunos casos, según la empresa, es posible comprar una casa prefabricada “llaves en mano”, es decir, aunando un paquete todo en uno de distintos elementos necesarios para nuestra vivienda. En estos casos, las casas “llaves en mano” pueden incluir des del proyecto técnico, la licencia de obras, la cimentación, la dirección de obra o el estudio geotécnico hasta el levantamiento topográfico, muebles e instalaciones básicas. Una opción muy a tener en cuenta si nuestra intención es la de poder entrar a vivir en el inmueble una vez construido, saltándonos largos procesos de dudas y dolores de cabeza hasta dar con el ajuste más idóneo.
Calidad, durabilidad y mantenimiento
Evidentemente, una de las preguntas que más rondan en la mente de quienes apuestan por este tipo de inmuebles es su durabilidad. Dado que se trata de una arquitectura en madera, gran parte del público tiende a creer que su mantenimiento será duro y la duración escasa. Sin embargo, la realidad es que todo depende de la calidad de los materiales, factor que compete a la empresa en cuestión, y, en segundo lugar, a nuestra dedicación. En este sentido, como recuerda FacilHouse, es necesario que, para preservar lo máximo posible el hogar, tengamos en cuenta los aparatos y electrodomésticos instalados, que funcionen bien y sean fáciles de mantener.
Al fin y al cabo, cualquier tipo de casa, desde una increíble mansión de mármol blanco hasta una rústica casa prefabricada de madera, necesita mantenimiento. Aunque, como punto a favor, las casas de madera, al venir ya construidas, garantizan un acabado desde cero cuyo desgaste por el paso del tiempo aún no habrá acontecido. En definitiva, una solución al encarecimiento del mercado y la ausencia de oferta para una gran demanda de inmuebles. Dotada de grandes ventajas que abarcan tanto una encomiable asequibilidad como múltiples opciones, desde cabañas y casetas de madera hasta casas modernas y americanas. Calidad sin necesidad de tocar madera.