El ascenso de la ciencia y la tecnología en el campo de la medicina y la salud es incuestionable. A diferencia del cambio climático, donde la visión “tecnooptimista” de la realidad y los avances tecnológicos está puesta muy en duda, con la salud es indudable que los avances médicos y tecnológicos ayudan a ofrecer una mejor calidad de vida a personas que sufren determinadas enfermedades o patologías.
Esta aceptación de la tecnología como complemento de la medicina y la salud se hace muy presente en, por ejemplo, el impulso que ha vivido en los últimos años la impresión 3D. Esta técnica tiene entre sus principales funciones la elaboración de prótesis sanitarias para implantes personalizados, piezas dentales o bucales e incluso en el ámbito de la podología.
Entre los problemas de salud frecuentes entre la población y que encuentran un buen aliado en la tecnología para mejorar la calidad de vida de los pacientes, aparecen dos a destacar: algunas patologías intestinales a las que se pone freno mediante ostomías; y los problemas auditivos que tienen solución mediante el uso de audífonos y dispositivos para mejorar la audición.
Ostomías, una intervención quirúrgica cada vez menos estigmatizada
En España se practican ostomías desde hace más de 25 años. Por norma general, esta intervención requiere tras su realización una serie de cuidados de enfermería. Hasta hace unos años, pasar por un proceso de este tipo se vivía como un trauma, pero por suerte, cada vez existe menor estigmatización con las intervenciones de este tipo.
Las ostomías son las intervenciones que tienen por objeto tratar enfermedades de los sistemas digestivos o urinarios mediante la abertura quirúrgica y extirpación de un órgano que no funciona de manera correcta.
Los pacientes ostomizados, que cada vez son más, ven con mejores ojos estas intervenciones debido al aumento en el tiempo de supervivencia de estos gracias al diagnóstico precoz, la mejoría en los cuidados y la evolución de las técnicas quirúrgicas.
Ser portador de una ostomía supone para el paciente una situación de incontinencia urinaria y fecal, la salida de sus heces, gases u orina por su abdomen y esto genera un cambio en su imagen corporal y una disminución de la autoestima. Para combatir estos problemas aparece la figura del estomaterapeuta y dispositivos cada vez más mejorados que favorecen la rehabilitación y la vuelta a la vida normal de esa persona.
Tipos de ostomías y pacientes más sensibles
Según el Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales estadounidense, las ostomías pueden ser permanentes o temporales. Son permanentes cuando se extirpa un órgano, las temporales son aquellas en las que el paciente necesita expulsar el material producido por sus intestinos mientras se recupera de la cirugía.
Las ostomías permanentes se realizan únicamente en pacientes que tienen un daño irreversible en el intestino o el recto, lo que hace imposible el cierre del estoma. Es aquí donde juega un papel importante la tecnología ya que el paciente necesitará de por vida bolsas para colostomía o ileostomía de por vida. Los productos para ostomías cada vez son más innovadores y están diseñados para mejorar su calidad de vida.
Los tipos de ostomías más frecuentes son la colostomía y la ileostomía. Su propio nombre indica el lugar de realización de la intervención quirúrgica, el intestino delgado en la parte del íleon para la ileostomía y una zona que se comunica con el colon para las colostomías.
Aunque existen muchos pacientes que necesitan cuidados de este tipo, el perfil mayoritario que se atiende en hospitales y clínicas son personas que sufren cáncer y con edad avanzada. No obstante, en los últimos años comienzan a aparecer casos con edades más tempranas y enfermos de Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII).
La OMS y los problemas de audición
Otras afecciones a la salud que encuentran en la tecnología una gran ayuda dirigida a mejorar la calidad de vida de los pacientes, son los problemas auditivos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que, en 2050, más de 900 millones de personas sufrirá una pérdida de audición discapacitante.
En la actualidad, unos 466 millones de personas ya padecen estos problemas. En niños, el 60% de los casos de pérdida de audición se deben a causas reversibles. La OMS afirma que la situación de las personas que padecen pérdida de audición mejora gracias a la detección temprana, a la utilización de audífonos, los implantes cocleares y otros dispositivos de ayuda. Además, el empleo de subtítulos, el aprendizaje del lenguaje de signos y medidas de apoyo educativo y social contribuyen a una mejor integración en la sociedad de estas personas.
Más allá de las consecuencias funcionales, que se traducen en la limitación de la capacidad de la persona para comunicarse con los demás, tras estos problemas está también la sensación de soledad, aislamiento y frustración, especialmente en las personas mayores, porque con la edad estos problemas se van agravando.
Audífonos, una solución tecnológica para enfrentar los problemas de audición
De los más de 466 millones de personas en todo el mundo con problemas de audición, unos 125 millones requieren el uso de audífonos. En España, el 27% de las personas mayores de 50 años padecen deficiencia auditiva.
En nuestro país, Cataluña es la comunidad líder en la venta de audífonos, seguida de Andalucía, Madrid y Comunidad Valenciana. Asturias y Cantabria son las regiones donde menos usuarios necesitan estos aparatos.
La venta de audífonos baratos está impulsando también el uso más frecuente de estos aparatos. Si hace unos años era una tarea difícil encontrar sonotones baratos, hoy en día es mucho más sencillo. Esto ocurre habitualmente con el desarrollo de la tecnología, en un primer momento es inaccesible al público en general pero a medida que se va implementando entre la población, el precio tiende a reducirse.
En la actualidad se pueden encontrar en el mercado dispositivos que mejoran la audición a precios inferiores a 100 euros, si bien hay que tener en cuenta que estos modelos tienden a no amplificar adecuadamente determinadas frecuencias.
Los audífonos están diseñados para satisfacer las necesidades auditivas particulares de cada usuario, pero para ello es importante de manera previa a su utilización someterse a pruebas auditivas controladas por especialistas.
Los problemas intestinales y auditivos son dos claros ejemplos de que el avance de la tecnología está ligado a la mejoría en la calidad de vida de los pacientes, y con ello alcanzar un mayor grado de aceptación social y mejora en la autoestima.