La Asociación Regional de Casas de Aldea (ARCA) ha mostrado este viernes su satisfacción por la aprobación por unanimidad en la Junta General del Principado de la modificación de la Ley de Afecciones Medioambientales del Agua, con la que el uso del agua en los alojamientos rurales pasa de considerarse industrial a doméstico.
Con esta medida, las casas de aldea y apartamentos rurales que no estén conectados a la red pública de saneamiento no estarán sujetos al impuesto correspondiente, y los que sí estén conectados a red de saneamiento tributarán con la tarifa doméstica.
Según ARCA, esta modificación supone un logro para el turismo rural asturiano alcanzado tras una larga y dura reivindicación, iniciada en el 2013, «algo muy necesario para un sector sumido en una profunda crisis».
La Asociación Regional de Casas de Aldea (ARCA), promotora de esta iniciativa, agradece la aprobación unánime de todos los grupos parlamentarios y el apoyo de la Dirección General de Turismo y de la Federación Asturiana de Empresarios.
