Naciones Unidas, 12 may (EFE).- Francia propuso hoy al resto de miembros del Consejo de Seguridad de la ONU un borrador de resolución para referir la situación en Siria a la Corte Penal Internacional (CPI).
De ser aprobado, el documento permitiría a la Fiscalía de la Corte con sede en La Haya investigar los crímenes cometidos durante la guerra en el país árabe.
Hasta ahora, la CPI no ha podido actuar dado que Siria no es miembro del tratado que constituyó el tribunal y, por tanto, necesita una decisión del Consejo de Seguridad para poder hacerlo.
Francia circuló hoy el borrador tras varios meses de trabajo en el texto, que según señaló a través de Twitter su embajador, Gérard Araud, busca recabar «el mayor apoyo posible».
El documento, visto por Efe, recuerda que es probable que en Siria se hayan cometido «crímenes contra la humanidad» y considera que la situación en el país «constituye una amenaza para la paz y la seguridad internacional».
Por ello, traslada a la Fiscalía de la CPI la responsabilidad de investigar los sucesos registrados en Siria desde marzo de 2011 y exige a Damasco y al resto de las partes del conflicto cooperación con el tribunal de La Haya.
El borrador invita al fiscal a informar al Consejo de sus progresos dos meses después de la adopción de la resolución y cada seis meses a partir de entonces.
La investigación, según el texto, tendría que ser financiada por los países firmantes del Estatuto de Roma y no por el sistema de Naciones Unidas.
De aprobarse, la resolución permitiría a la CPI investigar los supuestos crímenes tanto del Gobierno sirio como de la oposición.
La alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Navi Pillay, ha pedido en numerosas ocasiones la investigación, la primera vez en agosto de 2011.
El pasado abril, tras comparecer a puerta cerrada ante el Consejo, Pillay reiteró su llamamiento y llamó la atención sobre el deterioro de la situación en el país en los últimos meses.
Según la responsable de la ONU, en Siria se han producido violaciones graves de los derechos humanos por parte de ambos bandos, aunque a su juicio «la mayor responsabilidad» es del régimen.
El principal aliado de Siria en el Consejo de Seguridad, Rusia, se ha opuesto hasta ahora a la posibilidad de referir el caso a la CPI y a otras iniciativas contra el régimen de Bachar al Asad.
Moscú, como miembro permanente del máximo órgano de decisión de la ONU, tiene capacidad para vetar la resolución.