Madrid, 22 ago (EFE).- El Gobierno ha condenado hoy la entrada de un convoy humanitario ruso en Ucrania sin el consentimiento de las autoridades del país al considerar que «se trata de una violación clara de la integridad territorial de Ucrania».
En un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, el Ejecutivo ha sostenido que dicha acción representa «un acto contrario a las normas internacionales y a los acuerdos de Ginebra y Berlín suscritos por Rusia» e insta al Gobierno ruso a que el convoy sea devuelto a su territorio.
Una columna de 34 camiones con ayuda humanitaria rusa ha cruzado hoy la frontera de Ucrania, según la agencia rusa Interfax, mientras que el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso ha denunciado en su página web que los «interminables retrasos artificiales para comenzar la entrega de la ayuda humanitaria rusa a las regiones del sureste de Ucrania es intolerable».
El Gobierno español ha pedido que Rusia que «respete la soberanía, integridad territorial, unidad e independencia de Ucrania» y ha indicado que, si bien la ayuda humanitaria es «muy necesaria en la zona en conflicto», debe ser «canalizada en plena conformidad con el derecho internacional, la voluntad de las autoridades ucranianas y a través de organizaciones humanitarias».
Asimismo, ha llamado a las partes «a recuperar la vía del diálogo» para evitar «una escalada de resultados impredecibles».
