A todos nos encanta broncearnos y exponernos al sol sobre todo en verano, ya que, esta es la única época del año en la que podemos aprovechar para ir a la playa o hacer cualquier actividad al aire libre.
Sin embargo, siempre debes tomar en cuenta que el exceso de sol para tu piel no es sano y tampoco es recomendable. Es decir, nada te impide disfrutar de unos días de playa o hacer turismo rural en espacios abiertos durante el verano, pero no debes olvidar no excederte cuando de broncearse se trate, ya que, exponerse al sol de manera desmesurada constantemente puede incluso producir cáncer en la piel u otro tipo de enfermedades dermatológicas.
Por esto, ahora que el verano toca la puerta, te mencionaremos a continuación algunos peligros del sol para la piel.
Para empezar, el sol tomado en exceso puede provocar envejecimiento prematuro, daños oculares y como mencionamos anteriormente, cáncer de piel. El melanoma es el tipo de cáncer más peligroso y su factor de riesgo más importante es, precisamente, la exposición excesiva al sol.
Según el Institut Català d’Oncologia (Instituto Catalán de Oncología), cada año se registran unos 5.000 nuevos casos de melanoma en España, la mayoría en personas de entre 40 y 70 años, y está asociado a episodios de quemaduras solares acumulados a lo largo de la vida. Por ello es tan importante protegernos del sol desde la infancia.
Además, las radiaciones UVA tienen la capacidad de atravesar los cristales y las nubes y producen un bronceado ligero y no duradero a las pocas horas de tomar el sol, pero si te excedes, aunque no te quemes, el exceso de rayos UVA afecta a las fibras de colágeno y elastina de la piel. Por ello se debilita, se reseca y hay más flacidez, provocando también manchas y alergias en la piel, además de envejecimiento prematuro.
Por otro lado, las horas centrales, de 12 a 16 horas, son las peores para la exposición solar, ya que, el sol está perpendicular a la tierra y la radiación es mucho más elevada, por lo que causa más daño en la piel.
Así que, si vas a la playa este verano, te aconsejamos que los primeros días será suficiente con que estés 15-20 minutos expuesto al sol, luego puedes ir aumentando progresivamente el tiempo sin sobrepasar nunca las 2 horas. Y en todo caso, recuerda también que una forma muy sencilla de despreocuparse por el sol y prevenir quemaduras, es utilizar siempre un buen protector solar.
Soraya Andreina Pérez Mohammed