El Consejo de Gobierno ha aprobado el IV Plan Andaluz de Salud, documento que recoge la estrategia de la Junta en esta materia para el periodo 2013-2020, con el objetivo central de «reducir la desigualdad y facilitar que las personas vivan más años y con más calidad y autonomía», según ha explicado la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio.
El Plan, que implica a todas las áreas de la Administración autonómica, ha contado en su elaboración con la participación de 15 entidades sociales y asociaciones de profesionales y de pacientes. Su desarrollo se encauzará a través de planes de acción local, para llegar a todos los municipios de la comunidad autónoma.
El documento se organiza en seis compromisos, con 24 metas y 92 objetivos. El primero de ellos, según ha apuntado Sánchez Rubio, es aumentar la esperanza de vida y que los andaluces disfruten de una longevidad con más calidad y autonomía «ante el envejecimiento del envejecimiento». La esperanza de vida en Andalucía es actualmente de 83,7 años en las mujeres y 78,1 en los hombres, lo que supone 40 años más por persona que hace un siglo.
Así, la consejera ha explicado que, dentro de este objetivo, el Gobierno andaluz elabora actualmente el Plan Andaluz para el Desarrollo de los Servicios y Promoción de la Autonomía, que recoge medidas preventivas y de promoción para que las personas con discapacidad y en situación de dependencia moderada conserven el máximo tiempo posible las aptitudes para las actividades básicas de su vida diaria. Además, ha añadido, los servicios de rehabilitación del sistema sanitario público priorizarán la «recuperación integral» de sus pacientes y se fomentará la «imagen positiva» de las personas con discapacidad o con enfermedades crónicas.
La Consejería de Educación, Cultura y Deporte, por su parte, pondrá en marcha programas de promoción de la actividad física para personas mayores o en situación de dependencia. Esta iniciativa, según Sánchez Rubio, se incluirá en el futuro Plan Estratégico de Envejecimiento Activo de Andalucía, dirigida a la prevención de la enfermedad, la promoción de una vida saludable y el derecho a la participación de los mayores en lo relacionado con su vida. Fomento y Vivienda incorporará el Plan de la Bicicleta, mientras que Medio Ambiente y Ordenación del Territorio incluirá la evaluación del impacto de los proyectos industriales y del planeamiento urbanístico.
María José Sánchez Rubio ha incado como el segundo compromiso que plantea el IV Plan Andaluz de la Salud la protección de la salud de las personas ante los efectos de la globalización y de los nuevos riesgos ambientales y alimentarios. En este bloque, ha subrayado, la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural promoverá la vigilancia y control en la alimentación animal y potenciará la producción ecológica, mientras que Fomento y Vivienda elaborará la Ley Andaluza de Movilidad Sostenible, que incidirá en la contaminación ambiental, el uso de transporte público o bicicleta y la seguridad de los peatones.
El tercer compromiso, ha continuado, se dirige a fomentar recursos como las redes de voluntariado y los espacios públicos comunitarios. Sánchez Rubio ha considerado «fundamental» la impliacción de todos los actores de la salud en este proceso y, en esta línea, la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales promoverá la participación ciudadana a través de las asociaciones de autoayuda. Asimismo, está prevista la creación de un banco de conocimiento y de buenas prácticas en salud que integre todas las aportaciones municipales.
Igualdad
La lucha contra las desigualdades sociales, sobre todo las que tienen un gran impacto en la salud, como la pobreza, la exclusión social, el desempleo o el nivel educativo, es el cuarto compromiso del documento, según ha subrayado la consejera de Igualdad, Salud y Políticas Sociales. La Administración andaluza insistirá por ello en la cobertura de las necesidades básicas de los menores en situaciones socialmente vulnerables y de exclusión social, con especial atención a la alimentación y educación, y trabajará en el acceso al sistema de la dependencia de los colectivos más vulnerables.
La Consejería de Educación, Cultura y Deporte «priorizará» la financiación pública de las plazas escolares de 0 a 3 años en aquellos barrios y municipios «más desfavorecidos». Además, ha indicado, se firmará un convenio entre las consejerías de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, de Justicia e Interior y la Fiscalía Superior de Andalucía para el desarrollo del protocolo andaluz para la actuación sanitaria ante la violencia de género. Por otra parte, los profesionales de los servicios de orientación laboral de la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo se especializarán en la atención ciudadana de las zonas de mayor riesgo de exclusión.
El quinto objetivo, el fortalecimiento del sistema sanitario público a través de alianzas entre profesionales y ciudadanía, implicará reforzar ámbitos como la «investigación, las tecnologías y las infraestructuras». Sánchez Rubio ha subrayado en este sentido que las Unidades de Gestión Clínica facilitarán la gestión del conocimiento, la innovación y el desarrollo de nuevas respuestas de atención para la ciudadanía.
El IV Plan Andaluz de Salud plantea como sexto y último objetivo la «generación del conocimiento y las nuevas tecnologías como aspectos clave para la mejora de la salud de la población». De este modo, ha señalado la consejera, los intereses de la ciudadanía marcarán las líneas de investigación para la incorporación de las nuevas tecnologías en relación con medicamentos y productos sanitarios. Además, se propondrá la creación de una estrategia andaluza del conocimiento en la que estarán implicadas las universidades, el sector empresarial y el sistema sanitario para trabajar en nuevos servicios y procedimientos.
Los compromisos adquiridos en el Plan, que tiene consignados 98 millones de euros para lo que resta de 2013, se analizarán cada dos años a través de órganos de participación integrados por representantes de la ciudadanía y de las entidades locales.
Planes anteriores
En 1992, la Junta de Andalucía puso en marcha el I Plan Andaluz de Salud. Durante su desarrollo se creó el Sistema Sanitario Público y la Ley de Salud y se atendieron los problemas de salud de mayor impacto, como el cáncer, las enfermedades cardiovasculares, los accidentes de tráfico y el sida.
El II Plan Andaluz de Salud de 1999 integró nuevos derechos para los ciudadanos en el sistema, como la atención bucodental a toda la población infantil entre 6 y 15 años, de la que hasta ahora se han beneficiado 2,8 millones de niños, o el derecho a una segunda opinión médica, que ha registrado cerca de 4.200 solicitudes desde 2003. También planteó la atención dirigida a colectivos más vulnerables y prioritarios como la población inmigrante.
El III Plan Andaluz de Salud, creado en 2004, contó, por primera vez, con la participación de profesionales, ciudadanía, asociaciones, empresas, entidades locales e instituciones públicas. Durante los años que estuvo vigente se tramitó la Ley de Salud Pública de Andalucía, que entró en vigor a principios de 2012 y que planteó una nueva perspectiva enfocada a las políticas de protección y promoción. Además, se introdujo el enfoque de reducción de desigualdades sociales y la perspectiva de género.
La evaluación del III Plan reveló una mejora en la atención sanitaria a los colectivos vulnerables; un avance en la asistencia sanitaria, gracias a la creación de los planes integrales para abordar diferentes enfermedades, y un impulso definitivo a las nuevas tecnologías, con la puesta en funcionamiento de Salud Responde. También consolidó la acreditación de calidad en el sistema público y el modelo de gestión clínica, así como la estrategia en investigación.
El III Plan permitió también detectar áreas de mejora, por ejemplo, en la atención a personas en situación de discapacidad o en la participación ciudadana en el funcionamiento del sistema sanitario. Estos dos ámbitos se han integrado como elementos principales de la estrategia aprobada ahora por el Consejo de Gobierno.