MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) – William Christenberry es uno de los principales impulsores de la fotografía en color, un soporte que estuvo vinculado a la captura de imágenes más amateur durante mucho tiempo y que este artista consiguió desterrar de la noción artificial y comercial en la que se encontraba frente al blanco y negro en los años 50.
La Fundación Mapfre acoge desde este martes hasta el próximo 24 de noviembre una retrospectiva sobre la obra de este fotógrafo, quien destaca por su retrato del paisaje tradicional del sur de Estados Unidos.
Yolanda Romero, comisaria de esta muestra, ha destacado este martes durante su presentación la presencia de «los valores de la fotografía amateur», ya que incluso «enviaba sus carretes a revelar a la tienda local», ha explicado. De hecho, su primera cámara fue una Brownie, regalo de su hermano en Navidad, con la que hizo sus primeras fotografías en los años 50.
Christenberry (Alabama, 1936) viajó durante años a Hale County para documentar los escenarios de su infancia y juventud, por lo que muchos de los temas fueron fotografiados durante años, en su interés por captar lo que él mismo denomina «la estética del envejecimiento».
Sus imágenes se componen de casas abandonadas, iglesias rurales, cementerios, objetos encontrados en el campo o paisajes intervenidos por el hombre. Según indica Romero, «retrata la actividad humana a través de sus acciones, pero no a la figura humana».
PAISAJE PURO
La casa de su familia cerca de Stewart, el Palmist Building, la calle Beale en Memphis, los anuncios y las señales en medio del campo, el cementerio de Stewart y las casas abandonadas. Todos estos temas se convirtieron en iconos en el trabajo de Christenberry y muchos de ellos se muestran ahora en la Fundación Mapfre.
A mediados de los años 60 gran parte de la arquitectura vernácula y de los temas que Christenberry habia fotografiado habían desaparecido. La sustitución de ese mundo por otro nuevo no atraía su atención, por lo que comenzó a fijarse en al paisaje puro, que hasta entonces solo había sido escenario de sus imágenes.
Sin embargo, lejos de escoger una naturaleza monumental y la visión del paisaje romántico, presta atención a los elementos comunes, como árboles, caminos de tierra roja, los objetos encontrados, las nubes de tormenta, etc.