Valladolid, 9 nov (EFE).- El CB Valladolid buscará mañana ante el Laboral Kutxa una victoria que le permita olvidar la contundente derrota sufrida ante el Valencia, y lo hará con un nuevo director de juego, ya que debutará en la Liga Endesa el experimentado base norteamericano Jason Rowe.
Rowe está llamado a liderar a un equipo que sigue dolido tras ser superado por 51 puntos en la anterior jornada, lo que espera aprovechar el técnico Ricard Casas para que todos «den un paso adelante, se mantenga la constancia en el trabajo y se pueda generar un positivismo inmediato».
De hecho, según ha explicado el entrenador del cuadro vallisoletano, «el equipo va siendo un equipo». «Cada vez seremos mejores, porque cada semana damos un paso más en los entrenamientos, ahora ya tenemos el jugador que faltaba y eso nos tiene que dar mayor claridad de ideas», ha opinado.
Casas teme la intensidad física del próximo rival de su equipo. «Tienen muchos jugadores y doblan posición y eso genera una intensidad que es la que tenemos que saber afrontar, poniéndonos al mismo nivel, lo que nos va a requerir una gran exigencia», ha advertido.
«Quizá no hayan tenido buenos resultados, pero han tenido jugadores lesionados que ya están recuperados y además llegarán con ganas de iniciar una dinámica positiva», ha matizado el técnico catalán, quien quiere centrarse en su equipo «en la regularidad y la mejor manera de hacer las cosas».
El Laboral Kutxa llega a Valladolid con sólo un triunfo en su casillero, lo que le sitúa en la antepenúltima posición de la tabla, una más que el conjunto morado, que también ha sumado una victoria en las cuatro primeras jornadas, la lograda ante Cajasol, por lo que será un partido importante para el ánimo de ambos equipos.