Son muchas las personas que a lo largo de su vida deciden crear un negocio, y montar una heladería es una buena opción. Un trabajo en el que se pueden crear nuevos sabores, propuestas para los consumidores y con la que poco a poco se puede crecer e incluso crear varios puntos de venta.
En tienda.iberhosteleria.es han creado una guía muy interesante en la que ofrecen la información necesaria para contar con todo lo necesario para montar tu propia heladería.
Según nos comentan los expertos para montar una heladería es necesario contar con una mantecadora, con la pasteurizadora y con una vitrina expositora en la que podrás mostrar tus productos a los clientes. Y no podemos olvidarnos de las granizadoras, los montadores de nata y los dispensadores de chocolate.
Todo ello junto al local, mobiliario, rótulos, servilletas, envases, cucuruchos o barquillos para los helados y otros complementos son necesarios para crear un negocio profesional y atractivo.
La creatividad es esencial
Cuando montamos un negocio es importante ser creativos, tanto a la hora de elegir un buen nombre, una bonita decoración, crear nuevas propuestas para los clientes y también es necesario contar con campañas de marketing que hagan más apetecibles los productos.
En el mundo de los helados también siempre es importante ser creativo y original, buscar una identidad propia y ofrecer a los clientes la opción de comerse sus helados favoritos en el establecimiento, paseando o que puedan llevarlos a casa. Además también se pueden crear helados y distribuirlos por puntos de venta como pueden ser bares o establecimientos que estén situados en zonas estratégicos.
Crear una marca
Vivimos en un mundo en el que la competencia nunca descansa y en el que además ya hay marcas que tienen su nombre y productos bien posicionados en el mercado. ¿Cómo encontrar nuestro sitio en el sector?, las respuestas son trabajo, calidad y promoción.
Una marca necesita buenas referencias y por tanto es necesario contar con perfiles en redes sociales o publicidad en medios, vender sin anunciar es complicado; las buenas referencias harán que sean muchas más las personas que quieran probar los nuevos helados.
Invertir en calidad y nuevos sabores también es importante, de nada sirve una buena campaña publicitaria si los productos no son originales, sabrosos y variados; en una heladería es vital tener todo tipo de sabores y ofrecer a los clientes los «productos de la casa» y un trato agradable y personalizado.
Formación y reciclaje
Los helados se consumen en cualquier época del año, son muchas las personas a las que siempre les gusta tener un helado en su congelador o acercarse a una heladería a disfrutar de sus sabores favoritos, pero también es cierto que hay temporadas en las que el trabajo de cara al público desciende y por tanto tenemos dos opciones, descansar o formarse.
La formación es esencial hoy en día en la vida, asistir a cursos, aprender nuevas técnicas e incluso viajar para ver otras propuestas y negocios pueden ser la base para crear nuevas propuestas y sabores; es importante ser original pero también lo es conocer las tendencias del momento.
En el caso de tener experiencia en el sector también es bueno reciclarse, ponerse al día e ir conociendo nuevas técnicas, métodos de marketing y hacer todos los cursos necesarios para poder manipular alimentos.
El local
Una heladería necesita una serie de requisitos técnicos y legales, y en el caso de fabricar los helados habrá que disponer de maquinaria y de lugares de trabajo que cumplan con la ley, informarse e invertir en un local o lugar de trabajo que sea saludable, acogedor y funcional también es muy importante, pues además de sabor hay que ofrecer a los clientes una heladería atractiva en la que los sabores y colores también sean un buen reclamo.
¿Pensando en iniciar una nueva aventura profesional? Montar tu propia heladería es una buena opción.