En la cultura popular el león es el rey de la jungla, y su vida ha sido llevada tanto a la gran pantalla como a innumerables revistas, reportajes o especiales que podemos encontrar en la red o en una de esas interesantes enciclopedias o coleccionables que quizás podamos tener en casa, los leones son animales temidos por su presas y también admirados por millones de personas que han podido ver a uno o varios miembros de la manada en un safari o en un zoo, también hubo una época en la que este bello animal visitaba los pueblos cautivo siendo parte de los circos, hoy en día en muchas ciudades ya no están permitidos los circos con leones u otro tipo de animales.
Son bellos, fuertes, con un gran instinto para la caza y también una de las especies de nuestro planeta sobre la que más se ha escrito, ya en tiempos de la antigua Roma los leones formaban parte de la cultura popular, mucho antes también, el león representa fuerza, valor y coraje, es un animal temido por otras especies que conviven en su entorno.
Del león también podemos destacar su carácter sociable, es muy responsable cuando está con la manada, y destaca por su carácter apasionado y luchador, además suele ser muy celoso y protector con su hembra.
Varias fuentes apuntan a que también sabe trabajar en equipo con sus compañeros de manada durante la caza, el león es un animal que sabe marcar su terreno pero también un animal que sabe predecir el peligro.
Por desgracia para muchos el león quizás sea parte de leyendas o historias para los hijos de nuestros hijos o de nuestros nietos y únicamente puedan estudiarlos y verlos en fotos o en los libros de historia, su población ha ido disminuyendo alarmantemente durante el último siglo, algunos expertos apuntan a que en nuestro planeta ya no quedan más de 30.000 ejemplares, otras fuentes apuntan que quizás menos.
Además de su ya mencionada belleza el león es especial por sus dientes, su melena, y por su rugido, el león sabe comunicarse tanto cuando está furioso como cuando se ve amenazado o pasa miedo, pues hasta el más fiero de los animales también tiene sus sentimientos.
¿Cuánto años vive un león?
Según varias fuentes consultadas la vida de un león puede ser de unos 10 a 14 años y en el caso de la hembra pueden ser unos 18 o 20 años, siempre y cuando su entorno le sea favorable y los furtivos o el cambio climático no jueguen en su contra, para ello también hay que tener cuenta otros factores como son su alimentación, y su libertad, un león en libertad puede vivir más años y con ello contribuir a que su especie tenga nuevos ejemplares y el peligro de extinción se rebaje sustancialmente, cada vez que una hembra trae nuevos ejemplares al mundo las camadas pueden ser incluso de hasta cinco o seis cachorros.
No solamente hay leones en África, también en Asía hay ejemplares y desde animalesdavid.com nos cuentan que hubo un tiempo en el que esté animal también vivió en Europa.
El león también destaca por su pelo, sus garras, su mirada, y por su cola, un león puede alcanzar un peso de más o menos unos 180/200 kilogramos , y otro dato curioso es el tiempo que el león dedica a descansar, casi tres cuartas partes del día.
El color de su pelo puede variar según la zona en la que viva, incluso hay leones que son blancos.
Anteriormente mencionábamos su mirada, otro dato curioso de esté animal es su visión nocturna, mucho más desarrollada que la del resto de animales, y no podemos olvidarnos de su apetito, ¿Cuánto come un león?, hay datos publicados que afirman que los machos pueden llegar a comer unos 6 kilos de carne al día, las hembras unos 4 kilos.
El mundo del león es apasionante, lleno de leyendas, datos y curiosidades que se han ido contando desde hace muchos siglos, pero el dato que más nos debe preocupar es el descenso de su población en nuestro planeta, cada vez quedan menos ejemplares y por ello debemos intentar contribuir a su protección y rechazar cualquier tipo de maltrato o aniquilación de está especie.
Consejos:
Nunca le des de comer a un león en un zoo, deja que sean sus cuidadores los que lo hagan y nunca intentes acercarte a una cría o tomarte fotos arriesgadas, la culpa de lo que pueda pasar no será del león, será del que cometa la irresponsabilidad de incomodar a un animal libre en su entorno o cautivo y expuesto ante el público.