Vitoria, 5 dic (EFE).- La compleja construcción de la llamada Bóveda del Milenio, de la Catedral de Santa María de Vitoria, un templo del siglo XIV ubicado en el casco antiguo de la ciudad y que ha recibido numerosos premios internacionales por la restauración que se lleva a cabo en él desde hace 13 años, ha finalizado hoy.
Tras un año de trabajo, hoy se ha colocado la clave central de la bóveda, de 2.200 kilos, después de haber instalado durante este tiempo 347 piezas de piedra caliza negra procedentes de las canteras de localidad vizcaína de Markina.
Todas ellas han sido montadas y ajustadas en un alarde constructivo sin parangón desde el siglo XIX, ya que se ha hecho siguiendo el mismo procedimiento que el que se utilizaba antiguamente en la construcción de bóvedas de piedra.
La obra se inició montando los arcos perimetrales, tras ellos los arcos diagonales y los tramos intermedios, para colocar después todo el conjunto sobre la cimbra, la plataforma de madera que da forma a la cara inferior de la bóveda.
Tras la colocación de la clave, se montará en breve el altar mayor de piedra del siglo pasado que se ha podido recuperar.
Al acto de colocación de hoy han asistido el diputado general de Álava, Javier de Andrés, y el director de la Fundación Catedral de Santa María, Juan Ignacio Lasagabaster.
Las obras de restauración de la Catedral de Santa María comenzaron el año 2000.
Este templo del siglo XIV fue construido en la zona más alta de la vieja aldea de la que surgió la ciudad de Vitoria, sobre una iglesia anterior románica de la que no quedan restos y que había sido restaurada en varias ocasiones, la anterior en la década de 1960, pero sin éxito.
Las obras de rehabilitación han tenido un carácter integral, desde los cimientos hasta la parte más alta de la torre, y para ello se tuvieron que instalar complejas estructuras metálicas en su interior que posibilitaron la apertura de un programa de visitas guiadas, mientras los especialistas seguían con sus trabajos.
El año 2000 comenzaron estas visitas a las obras de restauración, que hicieron mundialmente famosas escritores como Ken Follet, que se inspiró en el templo para escribir «Un mundo sin fin», y José Saramago, y recibieron la visita de, entre otros, los reyes de España.
La catedral también ha recibido importantes premios, como el Europa Nostra, el galardón a la conservación y mejora de patrimonio cultural más importante en Europa.
Ésta fue la primera vez que un proyecto español recibía uno de los seis galardones principales que otorga anualmente la UE y Europa Nostra -Federación paneuropea de Patrimonio-, que eligieron el de la catedral de Santa María por haber convertido el templo en un «motor cultural, turístico, formativo, urbanístico, social y económico de Vitoria».