Una ruptura matrimonial suele ser un proceso complicado y poco agradable para las partes, en especial si existen hijos comunes de por medio. En este sentido, los hijos son la parte más débil y se debe priorizar su bienestar durante todo el proceso de divorcio.
A través de este artículo te proporcionamos una serie de consejos que deberías tener en cuenta para que los hijos en común no se vean demasiado afectados.
¿Qué vía de divorcio es la más recomendada?
La mejor opción ante un divorcio con hijos es acudir a la vía del divorcio de mutuo acuerdo o divorcio express.
Se trata de un procedimiento que supone varias ventajas como una mejor relación entre los padres, mayor rapidez y ahorro económico en el divorcio y, lo más importante, evita el inicio de un procedimiento judicial largo y difícil de asimilar para los menores.
¿Cuál es la mejor custodia para los hijos?
La custodia compartida por ambos progenitores es la más recomendada por los abogados especialistas en Derecho de Familia, aunque “actualmente es el Juez al que dentro del marco de las controversias entre los cónyuges le corresponde valorar y decidir si debe adoptar dicha medida a favor de los hijos” como explica el abogado Juan Ignacio Oñós, de Jionos Abogados.
Cada año son más los casos en los que se elige la custodia compartida en procesos de divorcio con hijos menores y se establece ya en varias Comunidades Autónomas como la opción principal.
No obstante, “una cosa es lo que nuestros tribunales desean, y otra cosa muy distinta que se den unos requisitos óptimos para que se pueda dar la custodia compartida en beneficio del menor”, añade Juan Ignacio Oñós.
Aunque fomenta la integración del menor con ambos padres y evita el sentimiento de pérdida de uno de los progenitores, en algunos casos la custodia compartida puede suponer una notable desestabilización para los menores en su vida diaria.
Por eso es importante analizar las circunstancias concretas de cada caso para buscar la solución más adecuada para los menores.
No se debe confundir la custodia compartida con la patria potestad. La patria potestad es el conjunto de derechos y obligaciones que mantienen los progenitores sobre los hijos no emancipados y es irrenunciable para ambos cónyuges, salvo excepciones muy contadas.
La guarda y custodia por el contrario es la forma habitual de convivencia de los hijos con sus padres, y puede ser asignada a un solo progenitor (custodia monoparental) o a ambos (custodia compartida).
¿Se debe llevar a los hijos ante el tribunal?
Si la vía de mutuo acuerdo finalmente no ha sido posible, se acudirá al divorcio de tipo contencioso.
En este sentido, la Ley de Enjuiciamiento Civil prevé la posibilidad de escuchar las declaraciones de los menores (por norma general a partir de los 12 años de edad) involucrados en procesos de divorcio. “El Tribunal recabará informe del Ministerio Fiscal sobre los términos del convenio relativos a los hijos y oirá a los menores si tuvieran suficiente juicio cuando se estime necesario de oficio o a petición del Fiscal, partes o miembros del Equipo Técnico Judicial o del propio menor”, según nos indica el abogado José Simarro, de Simarro Abogados.
Pero siempre habrá que tener en cuenta lo que indica el Tribunal Supremo. “El interés del menor no necesariamente ha de coincidir con su voluntad, debiendo valorar el juez su madurez y si sus deseos son propios del capricho o de influencias externas”, amplía Simarro.
En cualquier caso, aunque efectivamente exista la posibilidad de llevar a los menores ante el tribunal, no es recomendable y lo más razonable es intentar que los hijos se vean lo menos involucrados posible durante el procedimiento judicial.