(dpa) – La compañía de la imagen de los nietos a lo largo de todo el año o disfrutar cada día de los recuerdos de las vacaciones: los calendarios con fotos personales tienen todo el potencial para convertirse en el regalo perfecto.
Los calendarios fotográficos son muy populares para todo tipo de ocasión, ya sea para Navidad, un cumpleaños, el nacimiento de un bebé o un aniversario.
Además, no necesariamente tienen que ceñirse al comienzo real del año. Muchos proveedores en línea permiten comenzar el calendario a mitad de año o en el mes deseado, afirma Christine Bruns, de la revista especializada «c’t Fotografie».
Lo primero que se debe pensar es para quién será el calendario con los recuerdos de las últimas vacaciones o con fotos familiares. ¿Será la abuela que recibirá fotos de sus nietos? ¿Tiene sufiente espacio en la pared? Si no es el caso, un calendario de escritorio más pequeño sería más adecuado, en lugar de un calendario de pared de gran tamaño.
ELEGIR LAS FOTOS, LA CLAVE
Según Reinhard Merz, de la revista «Color Foto», quien busque un enfoque artístico puede narrar una historia con el calendario.
Otros prefieren utilizar imágenes específicas para cada época del año, como por ejemplo flores en primavera, nieve en invierno. «Por supuesto, se puede hacer, pero lo cierto es que es bastante aburrido», señala Merz.
En el siguiente paso, hay que clasificar las fotografías y analizar cuáles son adecuadas para un calendario. Y luego, buscar un proveedor donde imprimirlo. En general, los clientes tienen mucho donde elegir.
La otra opción es descargar un software o crear el calendario directamente en el navegador. Según los expertos, los distintos proveedores apenas difieren en su manejo. Sin embargo, algunos, como Cewe, no aceptan archivos TIF, mientras que otros permiten utilizar fotos a través de Dropbox.
Cewe está considerada como pionera en el campo de los fotocalendarios, ofrece buena calidad, según Bruns, y es uno de los proveedores más conocidos.
En la última prueba de «Color-Foto», Cewe resultó ser la ganadora en cuanto a precio y rendimiento, mientras que Whitewall recibió el consejo de compra en cuanto a «calidad de imagen».
COLORIDO, CON PEGATINAS O SIMPLE
«Muchos servicios han orientado su oferta y modelado su software de acuerdo a la propuesta de Cewe, solo queda un pequeño surtido», dice Bruns.
Algunos sitios ofrecen un relleno automático, otros permiten a los usuarios crear calendarios con fondos y añadir hasta el más mínimo detalle con diferentes colores, clip arts, stickers (pegatinas), tipos de letras y fuentes.
Para Bruns, algunas de las opciones de funcionamiento van incluso demasiado lejos. Algunos usuarios se sienten abrumados por ellas.
En lo que respecta a las plantillas de diseño, apenas hay límites para la imaginación. «Se puede crear y armar con mucho amor y dedicación», dice. La especialista señala que los pequeños proveedores suelen tener plantillas aún más bonitas.
Sendmoments brinda, según Bruns, un buen paquete general. En el caso del nacimiento de un bebé, por ejemplo, se pueden crear tarjetas, calendarios y libros de fotos con un mismo diseño.
Merz aconseja diseñar los calendarios de la forma más simple posible para que se destaquen mejor las fotografías. Su recomendación es utilizar solo una imagen por mes, porque si se utilizan varias competirán entre ellas por la atención del observador.
OBTENER LO MEJOR DE CADA FOTO
«Si no se es un experto, se puede dejar la optimización de las fotos en manos del software de cada proveedor», afirma Merz.
Bruns también aconseja confiar en la edición automática que brindan las aplicaciones si se quiere utilizar fotografías sin editar o tomas realizadas con un teléfono móvil.
También es posible a menudo aclarar un poco las fotos posteriormente, comenta, pero advierte que si no se tiene demasiada experiencia es mejor no cambiar los colores.
Los expertos recomiendan a quien quiera obtener la mejor calidad que aprenda un poco sobre los programas de edición de fotos y desactive luego la función automática del software. Esta función debe ser asimismo desactivada si se quieren utilizar imágenes ya editadas por fotógrafos.
LOS PRECIOS VARÍAN SEGÚN LA CALIDAD Y EL TIPO, NO SEGÚN EL TAMAÑO
«Un calendario pequeño no tiene por qué ser más barato que uno más grande», aclara Bruns. La especialista señala que un calendario de mesa puede costar lo mismo que uno de pared en formato A3, todo depende del tipo de papel, si lleva un bloque de madera en vez de estar encuadernado con espiral, los ornamentos y el diseño.
Por Bernadette Winter (dpa)