Berlín, 9 ago (dpa) – Unos 20 activistas climáticos ocuparon el fin de semana la central de cogeneración de la empresa sueca Vattenfall en Berlín-Moabit y, si bien la mayoría desalojó el sitio pronto, cuatro de ellos permanecieron hasta hoy en una grúa transportadora durante más de 34 horas, informó un portavoz de la Policía.
Los activistas, que forman parte del grupo «Acción Directa de Berlín» se manifestaron en contra de la importación y a favor de una salida más rápida del carbón en Alemania. Exigieron el fin de lo que llaman «capitalismo fósil».
Los ocupantes subieron a dos grúas transportadoras y a un silo de cenizas el sábado por la mañana. Desde allí desenrollaron pancartas con eslóganes que decían: «Quien nos desaloja está a favor del carbón» y «¿Cuándo antepondrán la vida humana a los intereses del capital?
La Policía inicialmente estuvo presente con alrededor de 40 efectivos pero no intervino. Un portavoz dijo que los agentes esperaron hasta que los activistas bajaran por propia voluntad y luego tomaron sus datos personales para hacer un informe de allanamiento. Según la misma fuente, cuatro activistas recién descendieron el domingo por la tarde de la grúa transportadora.
La Policía y un portavoz del operador sueco Vattenfall no vieron ninguna razón para evacuar por la fuerza la zona, ya que esto supondría riesgos para todos los implicados. Además, a la central eléctrica se le está haciendo reparaciones por lo que actualmente no está en funcionamiento.
La planta de Berlín-Moabit que opera Vattenfall, construida en 1900, procesa carbón y comenzó a utilizar también biomasa en 2013.
También en Mannheim subieron el sábado tres hombres y dos mujeres al tejado de una planta transportadora de carbón, que debió suspender sus operaciones durante cinco horas.
Los activistas han criticado repetidamente esta central «asesina del clima». Hace un año, más de cien personas ingresaron en la planta y bloquearon un camino de acceso y la cinta transportadora de carbón. La central eléctrica es operada por tres compañías de energía: RWE, EnBW y MVV.
Alemania tiene previsto cerrar gradualmente su industria del carbón a más tardar en 2038, como parte de los esfuerzos de Berlín por combatir el cambio climático. Sin embargo, la mayor economía de Europa sigue dependiendo en gran medida del carbón, que representa alrededor de un tercio de sus necesidades energéticas.