(dpa) – El acné aparece especialmente durante la pubertad y puede convertirse en un gran problema para los adolescentes. En Internet y en las redes sociales hay numerosos consejos y vídeos que prometen una rápida mejora: desde cremas y suplementos dietéticos hasta cambios de dieta supuestamente salvadores.
Sin embargo, la Asociación Alemana de Pediatras y Médicos de Adolescentes advierte que los jóvenes no deben confiar ciegamente en estas curas milagrosas y recomienda consultar al médico en caso de granos o espinillas persistentes.
Los expertos señalan que también existe la posibilidad de realizar la consulta por vídeo, lo que puede ser una buena alternativa en tiempos del coronavirus.
El problema de los granos es que cada acné es diferente, de manera que no existe un único antídoto. En primer lugar, el médico detectará la causa de las impurezas en la piel.
Entre los factores que pueden desencadenar el acné, los pediatras incluyen la ingesta de ciertos medicamentos o incluso bacterias. Estas últimas pueden ser tratadas con un antibiótico o, en los casos menos graves, con medicamentos de uso externo, tales como cremas, lociones y geles.
Las personas afectadas necesitan sobre todo paciencia y perseverancia: la primera fase de la terapia puede durar unos tres meses y en las primeras semanas del tratamiento se puede producir un empeoramiento pasajero.
Una vez que el acné haya desaparecido, se aplicará una terapia de mantenimiento para evitar que los granos vuelvan a salir.
Foto: Christin Klose/dpa-mag