Existen diversas cantidades de gatos obesos alrededor del mundo porque, como caso típico, son los consentidos de sus dueños y no hacen nada de ejercicio físico para eliminar esa grasa de más.
Sin embargo, son pocos los que son conscientes del daño que repercute en el animal tras alimentarlo desmedidamente, sin hacerle un control veterinario previo. Por ejemplo, ellos también son propensos a padecer diabetes.
Juegos para gatos para hacer ejercicios
Los gatos también deben mantener una rutina de ejercicios. Varios factores inciden en este punto, porque no se trata sólo del estado físico del gato, sino de su tranquilidad emocional. Una constante de ejercicio para el animal, le ayudará a liberar estrés.
Existen diversas formas de divertirlos, y, en algunas de ellas, no requieren juguetes para gatos. Una de esas alternativas, es estimular sus sentidos con linternas, cartón, hilos, paseos al aire libre, o que el dueño finja huir de él. Sin embargo, no hay nada que les guste más que jugar.
Los gatos se sienten más estimulados mientras están manipulando algún objeto, así que, debería usarse algunos de los juguetes destinados a los felinos: pelotas de goma, ping pong, bolas de lana, o esferas de plástico. Los gatos suelen jugar con ellos usando sus patas, pero, aun así, hay que vigilarlos para evitar que se ahoguen.
Tener una mascota, conlleva un sinnúmero de responsabilidades; entre ellas, la atención dada a ellas. En el caso del felino, están sus momentos de juegos, los cuales son los métodos ideales para ejercitarlos sin hacerles ningún tipo de daño, sino, al contrario.
Las mascotas estarán más animadas si hacen actividades que les gustan. El dueño debe estar dispuesto a pasar tiempo con su gato, y conocer las capacidades que tiene, porque, dependiendo de la raza que sea, o si resulta ser perezoso o no, su rendimiento varía. Debe prevenir al respecto.
Es recomendable mantenerles una rutina de juegos de unos diez minutos diarios. Ni siquiera es una tasa tan alta, pero es absolutamente necesaria. Muchas consecuencias reinciden en el cuidado que se le da a un gato, y, es por eso, que los potenciales dueños, deberían asesorarse al respecto antes de decidir cuidar al animal.
La importancia de controlar la salud de tu gato
Las personas suelen desconocer el cuidado que implica una mascota, en especial, un gato. Es, de forma relativa, otro miembro de la familia.
Debería mantener un plan de medicamentos desparasitantes que haya recetado el veterinario, y, también, llevar sus vacunas al día para prevenir cualquier enfermedad gatuna. Entre esas, persisten la conjuntivitis, otitis, rabia, peritonitis, problemas gastrointestinales, e, incluso, leucemia felina.
Su cuidado bucal también es importante. En vista de que el dueño no está las veinticuatro horas del día a su merced, desconoce todo lo que consume, y qué bacterias puede adquirir el minino como consecuencia. Por eso, el gato debería tener un cepillo de dientes exclusivo para él, y ser cepillado periódicamente.
Los veterinarios recomiendan que los felinos sean cuidados en el ámbito salubre. Los tratamientos no son necesariamente económicos, y, además, en un ser vivo más residiendo en las mismas paredes que su dueño.
Es importante hacer revisión de sus orejas, ojos, nariz, y contextura física para saber qué tan bien está.
En cuanto a la figura del minino, si un ser humano le mira desde arriba, debería ser capaz de ver una perfecta figura de reloj de arena, junto a la panza característica del animal. Lo ideal es que las costillas del gato sean levemente visibles al ojo ajeno, acompañado de una leve capa de grasa.
Su alimentación es tan importante como la de una persona.
Otros cuidados a tener en cuenta
Cuídalo de las bolas de pelo. Este es un problema bastante común entre los felinos, porque las hebras de pelo suelen acumularse en su interior, y repercuten en su estómago.
Ciertos especialistas recomiendan darle hierba gatera para cuidarlo de las consecuencias que las bolas de pelo atraen. Pueden conseguirse en tiendas para mascotas, o dedicadas exclusivamente a los gatos.