Huelva (España), 18 mar (dpa) – Varios miles de personas, entre ellas familiares de víctimas de crímenes violentos con gran repercusión, se concentraron hoy en el sur de España a favor de la prisión permanente revisable en el marco del debate abierto sobre su posible derogación.
Con globos y pancartas blancos, los manifestantes corearon en la ciudad de Huelva el lema «No estáis solos» y guardaron un minuto de silencio en memoria de Gabriel, el niño de ocho años que fue hallado estrangulado hace una semana en el maletero de un vehículo.
El caso conmocionó a España y avivó el debate sobre la máxima pena privativa de libertad del Código Penal español, una de las más duras de Europa, que supone pena de cárcel por tiempo indefinido sujeta a revisiones cuando el reo cumple entre 25 y 30 años de su condena.
La prisión permanente revisable fue introducida en 2015 por el gobernante Partido Popular (PP) para evitar que delincuentes condenados por crímenes graves salieran de prisión y reincidieran.
La oposición la recurrió poco después en bloque ante el Tribunal Constitucional al considerar que se trata de una «cadena perpetua encubierta» y que vulnera la Carta Magna, que establece que las penas deben estar «orientadas hacia la reeducación y reinserción social».
Los padres de jóvenes y menores asesinados en los últimos años en España reclamaron hoy que esta pena siga vigente, después de que el Parlamento español diera esta semana un paso para derogarla pese a la oposición del Gobierno de Mariano Rajoy, que quiere endurecerla.
El padre de la joven Diana Quer, cuyo asesinato se resolvió el pasado diciembre tras más de un año de búsqueda del cadáver, pidió que las muertes de las víctimas «no queden en una página de sucesos sino que marquen un antes y un después para crear una sociedad más justa».
A la concentración asistieron también los progenitores de Marta del Castillo, una menor cuyo cuerpo sigue sin ser localizado una década después de su desaparición, y los de la niña Mari Luz Cortés, que fue asesinada en 2008 tras un intento de abuso sexual.
También estuvo presente la ministra española de Empleo, Fátima Báñez, quien aseguró que la prisión permanente revisable «no es un tema ideológico» sino «de justicia» y de «seguridad para todos».
Otras ciudades españolas acogieron este fin de semana actos a favor de esta pena privativa de libertad.
Los familiares de víctimas de algunos de los crímenes más mediáticos de los últimos años en España recogieron recientemente tres millones de firmas para reclamar que siga vigente.