Madrid, 22 may (dpa) – Cinco películas después, los dinosaurios siguen vivos… Esta vez de la mano del español Juan Antonio Bayona, que imprime su particular sello a «Jurassic World: el reino caído», la nueva entrega de la saga que tuvo su presentación y estreno mundial en Madrid.
La película, que llega a los cines en España el 7 de junio y en América Latina a finales de mes, vuelve a reunir a los actores Chris Pratt y Bryce Dallas Howard en una aventura en la que la historia da un paso más allá de las anteriores, además de cambiar de escenario.
Para Bayona, de 43 años, fue un honor recibir la oferta de dirigir el rodaje de una saga creada por uno de sus grandes referentes del cine, Steven Spielberg. Ésa fue precisamente una de las grandes razones por las que decidió ponerse detrás de la cámara, añadió.
«Es curioso, porque en las otras películas que he hecho me decían que se notaba mucho la mano de Spielberg y ahora que por fin hago una película de Spielberg, me dicen que se nota mucho mi mano», bromeó en la rueda de prensa.
«Es muy complicado generalizar, el discurso creativo es una cosa muy misteriosa», dijo, pero «ha sido un lujo y un honor sentarme con él a trabajar, enseñarle los planos de la película y muchas veces coincidir en las mismas cosas en las que ponemos el acento (…) esa sintonía me reconfortaba mucho, me hacía sentir muy feliz».
Trabajar con Spielberg fue como en su día hacerlo con Guillermo del Toro para el film de terror «El orfanato», añadió.
La sintonía fue mutua, ya que según explicó, Spielberg le dijo al finalizar que sentía que «Jurasic World: el reino caído» había vuelto a la esencia de la primera «Jurassic Park».
En una comparecencia con continuos guiños entre el director y los actores, que confesaron que fue uno de los rodajes más divertidos en los que han participado, tanto Pratt como Bryce Dallas Howard subrayaron el hecho de que Bayona siempre los consultó y les dio la oportunidad de participar en el proceso creativo, sin por eso perder nunca su clara visión del proyecto.
De hecho, la actriz acabó emocionándose y vertiendo unas lágrimas al recordarlo. Como hija de un director (Ron Howard), conoce muy bien el proceso y los desafíos por los que pasa un cineasta, y aseguró que considera al español «un verdadero visionario».
También Pratt destacó el buen clima de la filmación, que se notaba en la propia rueda de prensa. Bayona reveló que al final les regaló a los dos un visor de director, para que un día se atrevan a ponerse detrás de las cámaras.
Para el director de «Lo imposible» y «Un monstruo viene a verme» no era la primera vez en Hollywood ni con grandes producciones, pero el despliegue de «Jurassic World» es difícil de igualar. En su caso le aportó a la película un toque gótico y de cuento de hadas, como él mismo explicó.
Cuando le ofrecieron el trabajo, el guionista Colin Trevorrow le dijo que quería que él fuese el director por «El orfanato». «Lo que me sedujo de la oferta fue pensar qué tenía que ver ‘El orfanato’ con Jurassic World'», señaló Bayona.
Todas las películas de la saga son como «un cuento moralista» sobre los límites y el uso de la ciencia, y en esta nueva entrega se da un paso hacia «un cuento de hadas moral», con su princesa, su castillo y sus monstruos.
También destacó el papel de la niña en la historia, interpretada por Isabella Sermon. «Jurassic World» es una película familiar y siempre aparecen niños, «pero lo que nos propusimos es que esta vez tuvieran un papel de gran relevancia», explicó Bayona. «Este personaje lleva al film a un lugar donde no había estado antes».
Respecto de si se sintió limitado en su trabajo, explicó: «Cuando uno se pone al servicio de una saga como ‘Jurassic World’ entiende cuál es el ADN y que es una historia mucho más grande de la que tú tienes que contar un episodio». «Tú te pones al servicio y a partir de ahí tienes total libertad», subrayó.
El secreto es, «como me dijo Chris el otro día, ‘darle al público lo que quiere pero no lo que espera’. Voy a copiarte la frase Chris, porque me pareció brillante», aseguró el director. «Sí, estuve brillante», respondió Pratt entre risas.
Por Romina López La Rosa (dpa)