Valencia, 20 nov (EFE).- El presidente del Valencia, Amadeo Salvo, afirmó durante la junta general ordinaria de accionistas del club, que el proceso de venta de la entidad a la empresa Meriton ha sido «uno de los más transparentes» que ha habido en el mundo del fútbol.
«El año ha estado marcado por un proceso de venta bastante complicado porque había muchos intereses de por medio», señaló Salvo, quien apuntó que es lógico que algún aspecto no haya trascendido por cuestión de confidencialidad.
Tildó de «acertadísima» la decisión de la Fundación Valencia CF de elegir la propuesta de Meriton, la aconsejada por el asesor que contrataron, y explicó que esta empresa compra las acciones de la Fundación por cien millones de euros al contado y se compromete a tener acabado el nuevo estadio en 2019, año del centenario del club.
«Lo que no se puede revelar es un contrato donde hay información personal», señaló.
Al margen del proceso de venta, Salvo explicó la gestión de su consejo de administración del último año, y aunque reconoció que fracasaron en la parcela deportiva la pasada temporada, destacó las mejoras logradas en las áreas financiera, social y comercial del club.
«Deportivamente, ha sido un año muy malo, sin el minuto fatídico de la semifinal de la UEFA, se habría aliviado un poco», apuntó en alusión a que el equipo fue eliminado en el último minuto del partido contra el Sevilla, lo que les privó de llegar a la final de la Liga Europa.
«Fue muy malo porque no se quiso entrar en el club como un elefante en una cacharrería. No se invirtió bien en refuerzos con la venta de Soldado y hasta que tomamos decisiones en noviembre nos encontramos un plantilla sobredimensionada y más cara que la actual», continuó.
«Teníamos una valoración de mercado baja, un compromiso dudoso y veníamos en una rampa descendente», agregó.
En el apartado comercial, apuntó que también se han visto obligados a «cambiar absolutamente todo».
«Ningún patrocinador en la historia del Valencia ha estamos más de tres años. Eso significa que no se cuidaba. Ninguno quiere volver a oír del Valencia. Había que cambiarlo absolutamente todo, desde el más mínimo detalle», dijo.
Además justificó la inversión realizada en Mestalla, tanto para adecentar estéticamente el estadio como para mejorar los palcos VIP y generar más ingresos hasta que se produzca el traslado al nuevo campo.
«Lo que hemos invertido en los palcos se amortiza en un año y ganamos dinero. Hoy es infinitamente superior el valor de nuestra marca», sentenció.
En el aspecto financiero, destacó que «se ha reducido la deuda con Hacienda en 10,6 millones de euros la deuda, la bancaria en 3,7 y hay 5,5 millones más de tesorería».
«El Valencia ha pagado 30.2 millones de euros de impuestos y no le debe nada a Hacienda», concretó.
Sobre el nuevo estadio, insistió en que estará acabado en 2019, que se ha creado una comisión de análisis para sacar el mejor rendimiento al recinto y señaló que aún se debe por las permutas diecinueve millones de euros al ayuntamiento de Valencia «que se van a pagar».
«En el proyecto que comenzó hace diez años no se pensó en ningún aspecto comercial, ni en tiendas, ni en museos, ni en nada. Era una obra faraónica. Ese solar costó 56 millones, el mas caro de la historia de la humanidad. Ni en Manhattan vale un solar eso», destacó al respecto de la situación que se encontraron.